2009/03/10

Bernanke dice que EE UU no dejará caer a los grandes bancos

Efe - Washington

El titular de la Fed insistió, en línea con lo señalado en ocasiones anteriores, que será imposible lograr una recuperación económica sostenible si no se estabiliza el sistema financiero. En medio de una acalorada controversia sobre la conveniencia de mantener vivas artificialmente a algunas grandes instituciones financieras, Bernanke calificó de "vital" la supervivencia de instituciones importantes desde el punto de vista sistémico.

Los senadores republicanos John McCain y Richard Shelby dijeron este pasado fin de semana que el Gobierno debería de permitir que algunos de los grandes bancos estadounidenses cierren sus puertas. "Ciérrenlos, permitan que dejen de hacer negocios", dijo Shelby, el republicano de más rango en el Comité Bancario del Senado, el domingo en declaraciones a la cadena de televisión ABC. "Si están muertos hay que enterrarlos", añadió.

El senador de Alabama no precisó qué bancos habría que cerrar, aunque sugirió que Citigroup podría estar en la lista, al decir que siempre había sido "problemático". Pero Bernanke dejó claro hoy que los planes del Gobierno no apuntan en esa dirección.

"Hemos reiterado la determinación del Gobierno estadounidense de asegurar que las instituciones financieras importantes desde el punto de vista sistémico pueden seguir cumpliendo con sus obligaciones", afirmó en un discurso en un centro de estudios de la capital estadounidense.

Además del Citigroup también están en una situación delicada Bank of America, la filial estadounidense de HSBC, Wells Fargo y JP Morgan, que han registrado grandes pérdidas por sus operaciones de derivados.

El diario The Wall Street Journal publica en su edición de hoy que, una semana después del tercer rescate de Citigroup, el Gobierno está analizando las medidas adicionales que podría adoptar en caso de ser necesario para estabilizar al banco. Un memorando interno de Citigroup al que ha tenido acceso el diario The New York Times señala que la institución ha registrado beneficios en los dos primeros meses del año.

El informe también menciona que el banco se siente cómodo con sus niveles de capital tras haber realizado distintas evaluaciones.

Nuevo plan de regulación financiera

El presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke, dijo hoy que es necesario reformar la regulación financiera de EE UU para reforzar la supervisión de los bancos, fondos de inversión y grandes instituciones financieras.

"Necesitamos tener una estrategia que regule el sistema financiero en su conjunto, en una forma integral", agregó el responsable del banco central estadounidense según el texto del discurso que pronuncia hoy en un centro de estudios en Washington.

Estos comentarios de Bernanke se producen cuando el presidente de EE UU, Barack Obama, y el Congreso comienzan a diseñar sus estrategias para reformar la regulación del sistema financiero, cuyo caos ha puesto en peligro la primera economía mundial.

Se espera que el encuentro de líderes financieros que tendrá lugar en Londres el próximo fin de semana discuta las reformas necesarias en ese frente a nivel global y siente las bases para la reunión del G20 que se celebrará en la capital británica en abril. Bernanke pidió que el Congreso dé el visto bueno a legislación de forma que el desplome de una institución no genere una situación caótica.

El responsable de la Fed señaló, asimismo, que las instituciones demasiado grandes, cuyo fracaso implica un riesgo en el sistema, deberían ser sometidas a una supervisión más rigurosa para impedir que asuman riesgos excesivos.

El discurso del titular del banco central estadounidense en el Consejo de Relaciones Exteriores ocurre en medio de un acalorado debate sobre el intervencionismo público en el sector financiero.

El Gobierno tiene ya una participación mayoritaria en la aseguradora AIG y se ha convertido en un importante accionista de Citigroup, el que un día fuera el mayor banco del mundo.

El pasado fin de semana, los senadores republicanos John McCain y Richard Shelby dijeron que el Gobierno debería permitir que algunos de los grandes bancos estadounidenses cierren sus puertas.