2009/03/27

Una SEC debilitada recibiría un mayor rol de supervisión

Por Kara Scannell

El plan de regulación financiera del gobierno de Estados Unidos ampliaría la autoridad de la Comisión de Bolsa y Valores de ese país (SEC) para incluir la fiscalización de asesores de fondos de cobertura, firmas de capital privado y capitalistas de riesgo.

Sería una nueva responsabilidad para una agencia que ha tenido dificultades para cumplir con las que ya tiene en la actualidad y que ha sido criticada por falta de conocimientos sobre el mercado.

La SEC fue públicamente amonestada por el Congreso por no percatarse de las señales que podrían haber conducido al fraude de inversión de US$65.000 millones perpetrado por el financista Bernard Madoff.

Varios años de recortes presupuestarios han dejado a la SEC con escasez de personal, mientras las industrias que debe supervisar han experimentado un crecimiento.

El expansivo plan del gobierno proyecta nuevas responsabilidades para muchas agencias gubernamentales, pero lo que no está claro es si la actual estructura podrá absorberlas.

El gobierno ya ha buscado aumentos de presupuesto para algunas de las agencias, incluyendo a la SEC, pero el Congreso está resistiendo un incremento del gasto debido a la posibilidad de un pronunciado déficit.

La expansión de la SEC se sumaría a la ya amplia agenda delineada por la presidenta de la agencia, Mary Schapiro. La funcionaria dijo al Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes este mes que la agencia necesitaba financiamiento extra para cumplir con sus objetivos de mejorar la regulación, incluyendo una mayor responsabilidad en la junta directiva y una mejor supervisión de los asesores de inversión.

El jueves, Schapiro le indicó al Comité de Banca del Senado que la agencia necesitaría más recursos para asumir responsabilidades adicionales, incluyendo la supervisión de los fondos de cobertura. Schapiro dijo que la SEC está considerando pedir al Congreso que requiera que los fondos de cobertura y sus asesores se registren con la agencia.

La responsabilidad de supervisar a los fondos de cobertura probablemente correspondería al grupo de evaluación de la agencia, que ha sido el blanco de críticas. El escándalo Madoff‐ expuso debilidades estructurales en las que el personal de una división no necesariamente compartía información con empleados de otras divisiones. Schapiro ha prometido corregir las flaquezas del grupo de evaluación centrándose en entrenar mejor a los examinadores y en reclutar a personal con más experiencia.

"El programa de evaluación de la SEC tiene que ser radicalmente reformado respecto del proceso instituido a mediados de los años 90, que ha sido un fracaso", dijo Harvey Pitt, ex presidente de la agencia.

El personal de la SEC, junto con su presupuesto, se ha mantenido estable o ha disminuido. Entre 2005 y 2007, la agencia perdió 10% de su plantilla. El personal de evaluación de la SEC, que inspecciona las firmas de corretaje y los asesores de inversión, se redujo en 7%. En la división encargada de hacer cumplir las normativas, el personal cayó 10%. Al mismo tiempo, el mercado ha crecido. Tan sólo el número de asesores de inversión registrados es de aproximadamente 11.000, mientras que el personal de la SEC es de 3.600.

Las funciones de la SEC han aumentado de otros modos. En 2006, el Congreso le asignó la supervisión de las firmas de calificación de crédito, pero la agencia no recibió financiación extra.

Fuente: WSJ

EE.UU. anuncia una ambiciosa reforma de la regulación del sistema financiero

Por Damian Paletta

WASHINGTON—El secretario del Departamento del Tesoro, Timothy Geithner, exhortó ayer a los legisladores estadounidenses a promulgar una amplia reforma a la regulación de los mercados financieros, poniendo en marcha un proceso que probablemente culmine en un control mucho más firme por parte del Estado.

Es probable que pasen meses antes de que la propuesta, que no fue acompañada de muchos detalles, sea aprobada en el Congreso. La iniciativa generó preguntas por parte de algunos legisladores que sostuvieron que el gobierno buscaba concentrar demasiado poder, y también motivó la oposición de algunos inversionistas, especialmente en el sector de los fondos de cobertura.

Geithner presentó su plan como una forma de restaurar la confianza de los mercados y restringir a las empresas cuya dimensión o complejidad pueda amenazar al sistema financiero. El plan repartiría el poder entre el Departamento del Tesoro, la Reserva Federal (Fed), la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC) y la Comisión de Bolsa y Valores (SEC). "Creo que es una falla trágica del país que llegáramos a esta crisis sin nada que remotamente se parezca a una autoridad amplia para hacer frente a crisis financieras en forma efectiva y proteger a la economía...".

El gobierno del presidente Barack Obama busca cambios en cuatro áreas: limitar los riesgos que podrían amenazar a la economía, fortalecer las protecciones para inversionistas y consumidores, cerrar las brechas en la supervisión regulatoria y coordinar cualquier acción de manera global.

En su testimonio ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes del Congreso estadounidense, Geithner se concentró en las medidas para contener los riesgos sistémicos. Eso incluye la creación de una agencia "independiente" para monitorear a las instituciones más importantes o las cadenas de pagos cuya falla podría tener un efecto desestabilizador sobre la economía. Este tipo de control abarcaría a los fondos de cobertura y las firmas de capital privado y capital de riesgo de cierta magnitud, a las cuales se les exigiría que se inscriban en la SEC.

"La mayoría de los gestores saben desde hace tiempo que la inscripción se avecinaba", afirma David Nelson, de DC Nelson Asset Management, un pequeño fondo de cobertura que ya está registrado en la SEC. Los exámenes y los trámites necesarios son costosos, especialmente para las firmas más pequeñas sin mucho personal administrativo, "pero esta es la realidad, e ir en su contra es inútil", opina Nelson.

El plan también busca imponer más restricciones sobre las operaciones de los fondos de inversión que invierten en los mercados monetarios y controles más estrictos sobre el mercado de derivados que no se transan en bolsa, abogando por el uso de una cámara de compensación centralizada.

"Se terminaron los días de la regulación 'suave'", afirmó el representante demócrata Barney Frank, presidente del Comité de Servicios Financieros.

Múltiples aristas

El gobierno de Obama espera reemplazar o reformar las reglas en casi todos los rincones de los mercados financieros, desde las hipotecas hasta el sistema financiero en las sombras que opera principalmente fuera del control de las autoridades.

Sin mucho revuelo, Geithner ha ganado aliados clave, incluyendo al presidente de la Fed, Ben Bernanke, y Frank, en su intento por aprobar los complejos cambios. Es probable que el presidente del Comité de Banca del Senado, el demócrata Christopher Dodd, haga avanzar el proceso a través del Senado de forma mucho más lenta.

La mayoría de los gestores de los fondos de cobertura, inversionistas, abogados y lobbistas afirmaron que la industria se está preparando para las nuevas reglas. Más que combatirlas, planean limitar las estipulaciones que consideran demasiado invasivas, como la idea de hacer públicos los registros de corretaje.

En apenas dos meses, Geithner ha propuesto una asombrosa cantidad de iniciativas cuyo objetivo es ampliar el acceso al crédito, estabilizar los bancos más débiles y apuntalar el mercado inmobiliario. La reforma regulatoria propuesta ayer es igual de ambiciosa.

Sus dos anuncios de esta semana —sobre la regulación financiera y la compra de los activos tóxicos que ahogan a los bancos— fueron diseñados en parte para allanar el camino hacia la cumbre del Grupo de los 20 que se realizará el 2 de abril en Londres. EE.UU. discrepa de la postura de países como Francia y Alemania, que buscan que los fondos de cobertura sean regulados de forma aún más estricta.

Algunos críticos no atacaron la propuesta, sino en el momento elegido para anunciarla, dado que la crisis financiera aún no ha amainado. "Los conceptos básicos de la reforma regulatoria me parecen sólidos", afirmó Frederic Mishkin, ex gobernador de la Reserva Federal que ahora es profesor de bancos e instituciones financieras en la Escuela de Negocios de la Universidad de Columbia. "Me preocupa, sin embargo, que lo que necesitamos hacer de inmediato es apagar el incendio, y ahora estamos discutiendo sobre rediseñar el sistema de combate de incendios".

Fuente: WSJ

El Estado español se endeuda al mayor ritmo de su historia

por Daniel Badía

El Gobierno apela al inversor para financiar el déficit público y, como consecuencia, el peso de la deuda sobre el PIB alcanza ya máximos desde el nacimiento del euro.

El Tesoro Público ya no acudirá más al mercado mayorista para captar financiación en el primer trimestre, por lo que, pese a que faltan tres días para que finalice marzo ya se puede hacer un balance de las elevadas necesidades de financiación que está despertando la recesión en la que está inmersa el país.

El Estado ha emitido letras, títulos de renta fija con un vencimiento máximo de un año, bonos, a un plazo máximo de cinco años, y obligaciones, a más de cinco años, por importe de 60.052,28 millones de euros en los tres primeros meses del ejercicio.

Es el mayor volumen en un primer trimestre del año desde al menos 1988, cuando el Banco de España inició la serie histórica. En relación al PIB trimestral estimado, el peso de la deuda emitida desde enero a marzo alcanza ya el 21,48%, el más elevado desde el nacimiento del euro y cinco veces superior al de hace sólo dos años. El año en el que más deuda se ha emitido en la historia, en 1997, se colocaron 23.484,31 millones en el primer trimestre, 37.600,9 millones en el segundo, 33.131,35 millones en el tercero y 29.949,65 millones en el cuarto.

La salud de la economía española está pasando factura a las cuentas públicas. En los dos primeros meses del año, los ingresos de la administración cayeron un 9,4%, según datos publicados el martes en el Congreso por el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, quien indicó que la ejecución presupuestaria de los dos primeros meses del año es «muy poco significativa», ya que los gastos del Estado se concentran en los últimos meses del año.

De ahí se explica que el porcentaje de la deuda sobre el PIB en el primer trimestre sea tan bajo en cada uno de los años «porque parece que el Estado concentra sus necesidades de financiación conforme se va acercando el final del año», indica José Carlos Díez, de Intermoney. En 2008, por ejemplo, en el primer trimestre del año el peso de la deuda era del 7,79% en los tres primeros meses, pero en el total del ejercicio alcanzó el 39,8%. Las previsiones apuntan a un peso total este año del 46,9%.

Por otro lado, la economía española entró oficialmente en recesión en el último trimestre de 2008 y las previsiones de Funcas para los tres primeros meses del año indican una caída intertrimestral del 0,6%. Además, los planes de estímulo, entre los que se encuentra el Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF) que inició su andadura en noviembre del año pasado, también han disparado las necesidades de financiación.

El elevado volumen que está colocando España en el mercado, junto con el resto de los Gobiernos de la eurozona, cuyas economías también atraviesan por una delicada situación, provoca un repunte de los costes de financiación. Alemania anunció el pasado miércoles que en el segundo trimestre lanzará al mercado deuda por 96.000 millones.

Si se atiende al diferencial medio de rentabilidad entre España y Alemania, a siete años (la vida media de la deuda del Estado es actualmente de 6,84 años), el sobrecoste anual que asumirá por los bonos emitidos en el primer trimestre del año asciende a unos 321,63 millones. El año pasado, éste fue de unos 28,25 millones.

Costes de financiación
No obstante, el diferencial con Alemania ha ido estrechándose en las últimas semanas. Desde el máximo que alcanzó el 17 de febrero en 128,04 puntos básicos, pocos días después de que Standard & Poor’s (S&P) sacara a España de la selecta lista de países con la máxima calificación AAA, ha caído hasta los 96,5 puntos básicos de ayer. Es decir, el Tesoro España paga casi un punto porcentual más que Alemania por financiarse.

Por ahora, la demanda no ha mostrado mucho síntomas de debilidad. Sólo en las emisiones de letras a doce meses del 17 de febrero, en la que la ratio de cobertura (relación entre la demanda y la oferta) fue la menor desde al menos la entrada del euro, el Tesoro se vio obligado a colocar menos importe del objetivo que tenía previsto.

Pero, gobiernos europeos han empezado a lanzar señales. El Tesoro británico no pudo colocar el lo que deseaba en una emisión a 40 años el pasado miércoles, mientras que a Alemania le sucedió con una operación a diez años el 7 de enero.

¿La próxima gran crisis inmobiliaria en EE.UU.?

Por Lingling Wei

Los préstamos para comprar bienes raíces comerciales están cayendo en mora a un ritmo acelerado, amenazando con causar miles de millones de dólares en pérdidas a bancos que ya han sido afectados por la crisis inmobiliaria.

La tasa de incumplimiento en unos US$700.000 millones en préstamos titularizados respaldados por edificios de oficinas, hoteles, tiendas y otras propiedades de inversión se ha más que duplicado desde septiembre a 1,8% este mes, según datos de Deutsche Bank AG. Mientras esa cifra es baja en comparación a las tasas de incumplimiento de las hipotecas de bienes raíces residenciales, es apenas menor que la tasa más alta alcanzada durante la última crisis a comienzos de esta década.

Algunos expertos afirman que ahora parece que el actual bajón de los bienes raíces comerciales estará a la altura o quizás supere el de comienzos de los años 90, cuando la deuda incobrable de propiedades comerciales jugó un importante rol para arrastrar a la economía hacia una recesión.

En ese entonces, cerca de 1.000 bancos e instituciones de ahorro estadounidenses quebraron. Los prestamistas debieron pasar a pérdida alrededor de US$48.500 millones en deuda de inmuebles comerciales entre 1990 y 1995, lo que representa 7,9% del total.

Desde fines de 2007, 47 bancos e instituciones de ahorro y préstamos se han declarado en bancarrota, de los cuales alrededor de una decena tenía una exposición inusualmente alta a hipotecas comerciales. Foresight Analytics, con sede en Oakland, California, estima que el sector bancario de EE.UU. podría soportar pérdidas de hasta US$250.000 millones por inmuebles comerciales en esta crisis. La firma de investigación proyecta que más de 700 bancos podrían quebrar debido a su exposición a los bienes raíces comerciales.

El sector tal vez no se verá tan afectado si la economía estadounidense sale de la recesión más rápidamente, y de esta forma repuntan los precios de los alquileres y las tasas de ocupación. Además, un mayor acceso al financiamiento —una meta clave del gobierno del presidente Barack Obama— podría provocar un aumento en los valores de las propiedades.

General Growth Properties Inc., uno de los mayores propietarios de centros comerciales de EE.UU., ha estado al borde de la bancarrota y recientemente no cumplió con los pagos de préstamos ligados dos centros comerciales en California y Texas, según Trepp, una firma que monitorea el mercado de deuda de propiedades comerciales. La torre John Hancock, en Boston, será vendida en una subasta de ejecución hipotecaria.

El problema cobró más importancia cuando Moody's Investors Service rebajó la calificación de Bank of America el miércoles, aludiendo a probables aumentos en incumplimientos en "tarjetas de crédito y préstamos inmobiliarios residenciales y comerciales". Bank of America no quiso hacer comentarios.

La deuda de bienes raíces comerciales es potencialmente más peligrosa para el sistema financiero que otros tipos de deuda como la relacionadas a tarjetas de crédito o préstamos estudiantiles debido a su magnitud.

La Mesa Redonda de Bienes Raíces, un grupo comercial, estima que los bienes raíces comerciales en Estados Unidos valen US$6.500 billones (millones de millones) y que están financiados por alrededor de US$3.100 billones en deuda.

En parte debido a que el mercado de deuda de bienes raíces comerciales es ahora casi tres veces más grande que a principios de los años 90, se anticipa que las pérdidas potenciales en dólares serían mayores.

Según un análisis de informes financieros bancarios realizado por The Wall Street Journal, el marcado cambio de dirección hacia los préstamos inmobiliarios puede apreciarse al comparar préstamos inmobiliarios comerciales —incluyendo hipotecas y préstamos para la construcción— con las llamadas relaciones de capital Tier 1 de los bancos, un indicador clave acerca de la capacidad de un banco para absorber pérdidas.

En 1993, menos de 2% de los bancos e instituciones de ahorro y préstamos de EE.UU. tenían una exposición a los bienes raíces comerciales que superara cinco veces su capital Tier 1. Para fines de 2008, esa cifra había aumentado a alrededor del 12%, o unas 800 instituciones financieras. Una relación más alta significa un colchón más delgado para cubrir préstamos incumplidos.

A diferencia de las hipotecas de bienes raíces residenciales—cuya mayoría fue extendida por tan sólo unas 10 grandes instituciones— cientos de bancos pequeños y regionales adquirieron grandes cantidades de bienes raíces comerciales.

Al 31 de diciembre, más de 2.900 bancos e instituciones de ahorro y préstamos tenían más del 300% de su capital de riesgo en préstamos de bienes raíces comerciales, incluyendo hipotecas y préstamos para la construcción.

Fuente: WSJ

Los riesgos que acarrea el plan de rescate financiero

Por David Wessel

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, finalmente ha colocado la pieza final de su plan de rescate financiero: las "sociedades público-privadas" que estarán encargadas de comprar préstamos y valores tóxicos en poder de los bancos en apuros.

Ya sabemos de que se trata. Las siguientes preguntas son: ¿Funcionará? ¿Habrá compradores y vendedores? ¿Y qué ocurre si no funciona?

En medio de la furia desatada por las bonificaciones pagadas a empleados de American International Group (AIG), una pregunta que se planteaba era si los fondos de cobertura u otros grandes inversionistas serían ahuyentados por la perspectiva de posibles audiencias en el Congreso y normas gubernamentales que cambian sin cesar, y, por consiguiente, no estarían dispuestos a aventurarse en un emprendimiento conjunto con el gobierno para comprar los activos. En parte debido a que Geithner les ofrece un trato muy conveniente, ese temor se ha disipado y ha sido reemplazado por las acusaciones de que Wall Street se enriquecerá a costa de los subsidios de los contribuyentes. "¡Robo al pueblo estadounidense!", dijo el premio Nobel Joseph Stiglitz.

El Departamento del Tesoro espera que los primeros inversionistas en efecto ganen mucho dinero. Eso alentará a que se sumen más compradores y revitalizará a los mercados para operaciones con préstamos hipotecarios y valores. Y, según el razonamiento del Tesoro, eso les pondrá un precio de mercado a esos activos de forma tal que todo el mundo tenga una indicación de lo que valen actualmente para que se reactiven las transacciones. Y ese paso hacia la normalidad en el funcionamiento del sistema financiero impulsará la confianza, cuya ausencia, según el diagnóstico del Tesoro, es un gran problema.

El secreto para financiar el plan de Geithner no es el dinero privado, sino los fondos del gobierno que no requieren de la aprobación del Congreso. Si un banco tiene un préstamo hipotecario de US$100 que logra venderle a una entidad pública-privada por US$84, los inversionistas privados contribuyen apenas US$6. El Tesoro pone US$6 y el Fondo de Garantía de Depósitos (FDIC) de EE.UU. garantiza un préstamo por US$72, y no necesita que el Congreso lo apruebe.

La Reserva Federal está haciendo algo similar por el lado de los valores; puede imprimir cantidades ilimitadas de dinero sin permiso del Congreso. El motivo por el cual se recluta a inversionistas privados es evitar que el gobierno fije los precios. "Ya que estos inversionistas tendrán el incentivo de negociar con firmeza para asegurarse que sus inversiones sean rentables, el contribuyente estará protegido ante la posibilidad de pagar en exceso", afirma Geithner.

La preocupación actual es si los bancos estarán dispuestos a vender. Eso es un tanto sorprendente, ya que no hace mucho nos hicieron creer que los bancos estaban desesperados por deshacerse de estos activos. La hipótesis de Geithner es que "parte de lo que está dificultando que los bancos se desprendan de esto es la ausencia de un mercado con financiación en el cual venderlo".

Preste atención a la frase "parte de". El problema no son los activos respaldados por hipotecas: su valor ha sido reducido en los libros, supuestamente a niveles que significan que los bancos no soportarán grandes pérdidas si los venden. El gran problema son los préstamos. Éstos figuran en los libros a los precios que los bancos esperan venderlos en el futuro. Si los bancos los venden a valores muchos más bajos de los que figuran en los libros, tendrán grandes pérdidas que debilitarán sus ya agotadas reservas de capital. Eso llevará a los reguladores a cerrarlos u obligarlos a aceptar tanto dinero de los contribuyentes que el gobierno será su propietario. Los bancos que han hecho adquisiciones, como J.P. Morgan Chase, Wells Fargo y Bank of America, han rebajado el valor de algunos de los préstamos en los portafolios de los bancos que compraron, así que podrían ser vendedores. Otros bancos, cuyas acciones se transan a precios muy bajos, podrían estar dispuestos a soportar una pérdida con la esperanza de que deshacerse de estos activos los vuelva más atractivos y les permita levantar capital. Pero si sólo los bancos fuertes se deshacen de los activos tóxicos, eso no resolverá el problema de tener bancos demasiado débiles o demasiado paralizados para otorgar préstamos.

2009/03/26

Materias primas como precursoras del rebote

por John Authers | Financial Times

Los grandes mercados bajistas de acciones del s.XX tocaron fondo y comenzaron su recuperación con la estabilización de los precios de las materias primas. Este es el principal hallazgo de Anatomy of the Bear, de Russell Napier, una respetada historia de los mercados bajistas.

Así que, ¿hasta qué punto debe entusiasmarnos que los precios de las materias primas se estén estabilizando tras la crisis del último año?

El cobre, un indicador para las bolsas en el pasado, ha ganado un 40%, en términos de dólares, desde que marcara un mínimo en diciembre. El petróleo ha subido más de un 50% y se cotiza de nuevo por encima de los 50 dólares (36,7 euros). El índice CBR gana un 14% desde su suelo hace algunas semanas.

En todos los casos, la tendencia, tras un prolongado periodo de descensos, parece claramente alcista.

Existen condiciones. El repunte más reciente es, al menos en parte, un fenómeno relacionado con las divisas, ya que va unido a la caída del dólar. El CRB ha ganado sólo un 5,5% en términos de euros desde su mínimo. Y es probable que el incremento del precio de las materias primas se deba más al aumento de la demanda de China, que puede estar acumulando materias industriales aprovechando los bajos precios.

La solidez de los paralelismos también se pone en duda.

Las materias primas han servido de indicador para las bolsas, ya que los grandes trastornos en los precios asustan a los inversores en renta variable –como la deflación en la primera mitad del siglo pasado y la inflación en el mercado bajista con suelo en 1982–.

Este colapso del mercado se produjo ante un trasfondo de índices de precios al consumo relativamente débiles. Pero durante los últimos 12 meses hemos asistido a grandes sustos, primero con la inflación y después con la deflación, provocados por el boom y el descalabro de las materias primas. Ahora, para bien o para mal, la deflación no rige los precios de los mercados de bonos.

El rebote de las materias primas puede ser un síntoma del final del miedo deflacionista. Si la deflación golpea después de todo, o si los gobiernos consiguen provocar una severa inflación, la situación no sería buena para las bolsas. Pero el mercado de materias primas aún demanda atención.

The Financial Times Limited 2009. All Rights Reserved

Geithner aboga por una reforma a las instituciones financieras

Por Maya Jackson Randall

Dow Jones Newswires

WASHINGTON (Dow Jones)--El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, dirá el jueves a los legisladores que el complejo sistema financiero del país es "demasiado inestable" y necesita urgentemente estándares mucho más sólidos y basados en el sentido común que pongan bajo supervisión todos los productos financieros.

"Necesitamos estándares mucho más sólidos para la apertura, transparencia y un lenguaje simple y con sentido común en todo el sistema financiero", señalará el funcionario ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara baja, según su testimonio preparado de antemano.

"Y necesitamos una supervisión fuerte y uniforme para todos los productos financieros que se comercializan a los consumidores e inversionistas, y una aplicación estricta de las normas para garantizar la total responsabilidad de aquellos que violen la confianza pública", agregó el funcionario.

Durante la audiencia, Geithner planea hablar sobre los planes del Gobierno del presidente Barack Obama para reformar las regulaciones financieras estadounidenses.

Bajo el plan, el Gobierno de Obama está buscando eliminar vacíos regulatorios con el fin de impedir sacudidas al sistema financiero, aumentar la protección al consumidor y los inversionistas, mejorar la coordinación internacional y colocar bajo supervisión federal más productos financieros complejos.

Geithner indicó que el Gobierno está desarrollando un plan para impulsar la regulación del consumidor y el inversionista, así como una nueva iniciativa "para tratar temas sobre la supervisión prudencial, los paraísos fiscales y el lavado de dinero en jurisdicciones débilmente reguladas".

Geithner agregó que el sistema financiero necesita una entidad única que supervise los riesgos que enfrenta. Además de supervisar a las firmas sistémicamente importantes, esa entidad tendría la autoridad para vigilar los sistemas de pagos y compensación sistémicamente importantes, dijo Geithner, quien describió como fragmentada la autoridad federal sobre los segmentos de acuerdos de canje por incumplimiento crediticio y otros derivados que se negocian en los mercados extrabursátiles.

Adicionalmente, Geithner señaló que todos los asesores de fondos de cobertura que administren activos superiores a cierto límite deberían tener la obligación de registrarse en la Comisión de Bolsa y Valores.

"No hay datos disponibles confiables y extensos que permitan determinar si (los fondos de cobertura) representan individual o colectivamente una amenaza para la estabilidad financiera", dijo Geithner. "Sin embargo, tras el episodio Madoff, está claro que, con el fin de proteger a los inversionistas, debemos cerrar las brechas y debilidades en la regulación de los asesores de inversión y los fondos que manejan".

Adicionalmente, el Tesoro quiere que la SEC fortaleza el marco regulatorio para los fondos del mercado de dinero.

2009/03/25

Bernanke y Geithner piden más autoridad sobre las firmas no bancarias

Por Michael R. Crittenden y Maya Jackson Randall

WASHINGTON—El gobierno de Estados Unidos necesita poder tener la capacidad de tomar el control y desmantelar una amplia gama de instituciones financieras no bancarias importantes para la economía, afirmaron altos funcionarios económicos ante el Congreso estadounidense el martes, aunque no se especificó quién ejercería esa autoridad.

El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, y el secretario del Tesoro, Timothy Geithner, les dijeron a legisladores de la Cámara de Representantes que la experiencia del gobierno con American International Group Inc. pone de manifiesto la necesidad de lidiar con instituciones cada vez más complejas e importantes para el sistema.

"Si una agencia federal hubiera tenido tales herramientas el 16 de septiembre, podrían haberlas usado para poner a AIG bajo conservaduría o sindicatura, desmantelarla lentamente, proteger a los titulares de las pólizas de seguros, e imponer recortes a los acreedores y las contrapartes como fuera apropiado", le dijo Bernanke al Comité de Servicios Financieros de la cámara baja.

Tanto Bernanke como Geithner afirmaron que un programa de este tipo podría delinearse siguiendo la forma en la que el Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC) de EE.UU. toma el control y maneja los activos y pasivos de los bancos estadounidenses. Bernanke incluso sugirió que el FDIC podría ser la agencia adecuada para ejercer esa autoridad.

Eso marca un quiebre con Geithner, quien sostuvo que el Departamento del Tesoro debería ser el que posea esa autoridad. Geithner indicó que el gobierno de Obama quiere tener la capacidad de actuar como conservador de grandes firmas financieras que se encuentran al borde del colapso, una autoridad que les permitiría a las autoridades gubernamentales renegociar o cancelar contratos vigentes, y vender o transferir los activos o pasivos de una firma.

"Este proyecto de ley llenaría un vacío importante en la actual estructura regulatoria de los servicios financieros con respecto a las instituciones financieras no bancarias", afirmó Geithner.

El representante demócrata Mel Watt, del estado de Carolina del Norte, cuestionó si sería apropiado que tal poder resida en el Tesoro, que es encabezado por funcionarios designados políticamente.

El Tesoro busca expandir su portafolio de supervisión en momentos en que la Casa Blanca y el Congreso consideran una exhaustiva revisión del sistema regulatorio estadounidense. Además de otorgar cierta autoridad de resolución a alguna agencia, las autoridades gubernamentales también han dicho que quieren darle a un cuerpo regulador la capacidad de monitorear los riesgos para el sistema financiero en su conjunto.

Bernanke, cuya Reserva Federal a menudo ha sido nombrada como el potencial "regulador de riesgo sistémico", sostuvo que la autoridad para lidiar con instituciones no bancarias a punto de quebrar podría quedar en manos de la FDIC "o algún otro cuerpo", y agregó que cualquier decisión por parte del gobierno para actuar debería ser tomada tras realizar consultas con la Casa Blanca y otros reguladores. La clave, afirmó, es cambiar las leyes actuales.

La creación de cualquier tipo de autoridad de resolución dependería de leyes promulgadas por el Congreso, y los legisladores más importantes sugirieron el martes que también opinan que se necesita una supervisión más amplia sobre las firmas financieras.

Fuente: WSJ

Gordon Brown pide la reforma de las instituciones globales

Por Joanna Slater

Un regreso al proteccionismo y una falta de cooperación entre los países son los riesgos más preocupantes que enfrenta la economía mundial, dijo el primer Ministro del Reino Unido, Gordon Brown, el miércoles.

"El mayor peligro que enfrentamos a medida que el comercio comienza a decaer es que los países recurran a medidas proteccionistas", dijo Brown, quien indicó que prevenir tales medidas será una de sus prioridades en la reunión del Grupo de los 20 la próxima semana en Londres.

Brown ha estado tratando de persuadir a los líderes del G-20 para que respalden los llamados del presidente estadounidense Barack Obama de nuevas medidas de gasto gubernamental para tratar de darle un impulso a la tambaleante economía mundial, medidas que han sido rechazadas en ciertas partes de Europa.

La cumbre es el inicio de un proceso, dijo Brown, el cual "debe terminar en la reforma de las instituciones globales". Brown, hablando en un evento organizado por The Wall Street Journal en Nueva York, argumentó que las instituciones como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, creadas en una era anterior, deben cambiar para enfrentar los retos de una economía globalizada.

El mandatario subrayó la necesidad de una mayor financiación para el FMI, tanto para ayudar a los países a prevenir crisis y luchar contra ellas cuando se presenten, especialmente en regiones muy golpeadas como Europa Central y Oriental.

El gobierno británico hará lo necesario para volver al crecimiento económico, al tiempo que la deflación es el principal problema a corto plazo.

"Creo que a corto plazo todos estamos preocupados por los problemas que podrían derivar de la deflación", dijo Brown.

Brown indicó que "nadie sugiere que llegaremos a la reunión del G20 y que pondremos sobre la mesa" los planes del presupuesto nacional.

"Lo que sugerimos es que, entre todos, tenemos que ver lo que ya hemos hecho hasta ahora... ver el efecto de la expansión monetaria cuantitativa y entonces decir lo que debería pasar a continuación. Vemos que hay consenso, no desacuerdo sobre esto".

Brown dijo que, en cuanto a la política monetaria, varios bancos centrales ya han fijado tasas de interés muy bajas así como emprendido medidas de expansión monetaria cuantitativa. En una aparente referencia al Banco Central Europeo, señaló que "algunas autoridades tienen que debatir todavía si bajan más las tasas de interés".

Brown señalo que, aunque la atención a corto plazo estará en la deflación, habrá que enfrentarse a las amenazas inflacionistas a largo plazo como los elevados precios del petróleo, en cuanto se recupere la economía.

"Será un problema al que tendremos que prestar atención... Tenemos que mejorar de verdad nuestra forma de ver cómo podemos llegar a acuerdos que puedan controlar la materia prima más volátil y que afecta a los más desprotegidos", agregó.

Fuente: WSJ

2009/03/24

BBVA cree que el BCE bajará los tipos a cero en los próximos meses

Ep - Estados Unidos - 23/03/2009

"La línea que ha seguido la Reserva Federal llevando los tipos de interés a cero la va a seguir el Banco Central Europeo y veremos en los próximos meses tipos de interés en cero", subrayó Escrivá durante el BBVA Foro Económico en Houston.

Asimismo, destacó que el BCE seguirá las políticas no convencionales que ya ha marcado la Reserva Federal y que el instituto emisor europeo jugará con las expectativas, por lo que no se conformará con situarlos en este nivel sin margen de bajada, sino que los va a mantener ahí "por mucho tiempo".

El director del Servicio de Estudios también señaló que el BCE también va a seguir los pasos de la Fed a la hora de expandir el balance para la compra de activos, bonos gubernamentales y activos privados. "Vamos a ver una expansión monetaria sin precedentes por canales inusuales por mucho tiempo, lo que va a ayudar a los mercados", añadió.

Escrivá también resaltó que actualmente la economía internacional se encuentra en una situación histórica porque según recordó, habría que remontarse a la crisis del 29 para encontrar tantos países en situación de recesión al mismo tiempo, ya que actualmente hay 65 países en recesión y este número podría ir aumentando si la situación internacional no mejora, principalmente de Europa del Este.

Fuente: Cinco Días

China pide una moneda de reserva que sustituya al dólar

Por Andrew Batson

BEIJING—China pidió la creación de una nueva moneda de reserva internacional que, a la larga, reemplace al dólar y propuso una amplia reestructuración de las finanzas globales que refleje el creciente descontento de los países en vías de desarrollo con el rol de Estados Unidos en la economía global.

La inusual propuesta pública, hecha por el gobernador del banco central Zhou Xiaochuan en un ensayo difundido el lunes en Beijing, es parte de la actitud cada vez más enérgica por parte de China para delinear la respuesta global a la crisis financiera.

La propuesta china de crear una moneda de reserva internacional se produce después de que Rusia lanzara una iniciativa similar a principios de mes durante los preparativos para la próxima cumbre del Grupo de los 20 (G-20). Al igual que China, Rusia recomendó que el Fondo Monetario Internacional (FMI) emitiera la moneda y destacó que la propuesta provenía de una necesidad de actualizar "el obsoleto orden económico mundial unipolar".

Los líderes de China y otras economías emergentes como Rusia e India están dejando en claro que pretenden un orden económico menos dominado por EE.UU. y otras naciones ricas. Beijing no ha ocultado su frustración por su dependencia financiera de EE.UU. Este mes, el premier chino Wen Jiabao expresó públicamente sus "temores" respecto de la gran cantidad de bonos del gobierno estadounidense en manos de Beijing.

La propuesta de Zhou llega en medio de los preparativos para una cumbre del G-20, que reúne a los mayores países industrializados y en vías de desarrollo del mundo, que tendrá lugar en Londres la próxima semana. Durante reuniones anteriores, los países desarrollados a menudo han criticado las políticas económicas y monetarias chinas. Esta vez, China ha pasado al ataque.

En su ensayo, publicado en chino e inglés en el sitio Web del banco central chino, Zhou se mostró partidario de reducir el dominio de unas pocas monedas, como el dólar, el euro y el yen, en el comercio y las finanzas internacionales. La mayoría de los países concentra sus activos en esas monedas de reserva, lo cual exagera el tamaño de los flujos y exacerba la volatilidad de los sistemas financieros, afirmó. La adopción de una moneda de reserva que no pertenezca a ningún país facilitaría el manejo de todas las economías, indicó. También podría constituir la base de una forma más equitativa de financiar el FMI, sostuvo. China está entre los países que han soportado presión para que aporten más dinero para ayudar al FMI.

"Nadie considera que esta sea la solución perfecta, pero al poner el tema sobre la mesa, los chinos han redefinido el debate", afirmó Eswar Prasad, profesor de política comercial de la Universidad de Cornell y ex funcionario del FMI. "Representa una reacción muy enérgica de China sobre una cantidad de frentes donde ellos mismos se sienten presionados por los países avanzados".

Los obstáculos técnicos y políticos para implementar la propuesta china son enormes, de modo que, incluso si obtuviera el respaldo de otros países, es improbable que la iniciativa cambie el rol del dólar a corto plazo. "El reestablecimiento de una moneda de reserva nueva y aceptada ampliamente con un valor de referencia estable llevará un largo tiempo", reconoció Zhou.

Una portavoz del Departamento del Tesoro de EE.UU. prefirió no hacer comentarios sobre las opiniones de Zhou. En las últimas semanas, altos funcionarios del gobierno de Barack Obama han intentado tranquilizar a Beijing al asegurarle que el actual frenesí de gastos de Washington es un esfuerzo a corto plazo para revitalizar la economía, no una tendencia de largo plazo.

Los comentarios de Zhou—que llegan tras las declaraciones de Wen sobre la seguridad de los activos de China en dólares— parecen constituir una advertencia a EE.UU. de que no puede esperar que China financie su gasto de forma indefinida.

La propuesta del titular del banco central refleja tanto el deseo de China de tener sus US$1,95 billones (millones de millones) de reservas en una denominación distinta al dólar estadounidense y las escasas alternativas de las que Beijing dispone en la actualidad.

Zhou sostuvo —sin nombrar la divisa estadounidense— que la pérdida de facto del estatus de moneda de reserva también beneficiaría a EE.UU. al evitar crisis futuras. Debido a que otros países continuaron invirtiendo su dinero en dólares estadounidenses, argumenta el gobernador, la Reserva Federal pudo llevar adelante una política irresponsable en los últimos años manteniendo las tasas de interés demasiado bajas por demasiado tiempo y, de esta forma, contribuyendo a inflar la burbuja inmobiliaria.

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"La aparición de la crisis y su contagio a todo el mundo reflejan las vulnerabilidades inherentes y los riesgos sistémicos del sistema monetario internacional", señaló Zhou. La cantidad e intensidad de crisis financieras sugiere que "los costos de este sistema para el mundo podrían haber superado a sus beneficios".

Zhou no es el primero en plantear ese argumento. "El sistema de reservas en dólares es parte del problema", señaló el economista de la Universidad de Columbia Joseph Stiglitz en un discurso en Beijing la semana pasada, debido a que hace que gran parte del efectivo del mundo llegue a EE.UU. "Necesitamos un sistema global de reserva".

Santander solicita a Gordon Brown una competencia leal en Reino Unido

por Roberto Casado | Londres

Alfredo Sáenz, consejero delegado de la entidad española, ha aprovechado una reunión de banqueros con el primer ministro británico para pedir que los grupos nacionalizados no aprovechen el apoyo público para ganar terreno a sus rivales privados.

El ejecutivo de Santander ha sido el único español presente esta mañana en un encuentro de Brown con trece banqueros internacionales, cuyo objetivo era preparar la cumbre de líderes del G20 (grupo de veinte países destacados de economías desarrolladas y emergentes) que se celebrará el 2 de abril en Londres para pactar medidas que frenen la recesión global.

Según fuentes del Gobierno británico, la intención del primer ministro era "conocer la visión de la industria bancaria sobre la actual situación económica" y a la vez, "explicar a sus interlocutores los planes de las autoridades de Reino Unido para reformar el sector financiero, estabilizar los mercados, restaurar el flujo de crédito y fortalecer el sistema bancario". Además, Brown ha pedido a los banqueros que se evite en el futuro el "mercantilismo financiero", que habría causado en parte la crisis actual.

Sáenz acudía a la reunión, celebrada en la residencia oficial de Brown en la calle Downing Street, con dos prioridades: reclamar un terreno de juego equilibrado entre bancos nacionalizados y privados, y defender la aplicación internacional del sistema de regulación de la banca española.

En el primero de esos asuntos, Santander es muy sensible ante la situación creada en Reino Unido, donde el Gobierno británico ha tomado participaciones mayoritarias en el capital de cuatro bancos (Royal Bank of Scotland, Lloyds, Northern Rock y Bradford & Bingley). El grupo español compite con esas entidades a través de sus filiales británicas Abbey National y Alliance & Leicester.

Sáenz ha reiterado ante Brown un reciente mensaje lanzado en Nueva York, según fuentes cercanas al banco español. "La ayuda pública concedida en algunos países podría perjudicar a instituciones bien gestionadas que no han necesitado la intervención del Gobierno. Comprendo que una situación excepcional como la actual requiere medidas excepcionales, pero hay que tener cuidado ante posibles distorsiones de la competencia que generan incentivos perversos y determinarán el futuro sistema financiero", dijo Sáenz en Estados Unidos.

Desde el Gobierno británico se asegura que las firmas nacionalizadas van a ser gestionadas de forma independiente y que volverán a manos privadas en cuanto sea posible. Pero en las últimas semanas, Brown ha obligado a que esos bancos aumenten sus créditos a los clientes británicos, lo que puede estrechar los márgenes para todo el sector.

En cuanto a la regulación financiera, las autoridades británicas defienden la instauración del sistema por el que los bancos deben acumular capital en las épocas boyantes para cubrir pérdidas cuando llega la crisis, mecanismo que ya funciona en España.

Santander no ha recibido capital público, aunque el Gobierno español ha implantado otras medidas de apoyo a los bancos como las garantías a determinadas emisiones de títulos.

Brown ha estado acompañado en la reunión por Alistair Darling, ministro de Economía, y Adair Turner, presidente de la autoridad financiera británica (FSA). Los banqueros presentes, además de Sáenz, eran John Varley (Barclays), Baudouin Prot (BNP Paribas), William Rhodes (Citigroup), David Mulford (Credit Suisse), Josef Ackermann (Deutsche Bank), Andreas Treichl (Erste Group Bank), Richard Gnodde (Goldman Sachs International), William Winters (JPMorgan Chase), Nobuo Kuroyanagi (Mitsubishi UFJ), David Duffy (Standard Bank International), Peter Sands (Standard Chartered) y Alessandro Profumo (UniCredit).

Tras el encuentro, Brown ha salido hacia Estrasburgo (Francia) para pronunciar un discurso ante el Parlamento europeo.

Fuente: Expansión

Desplazar al dólar sería una tarea titánica

Por Joanna Slater

El llamado de China para que se cree una nueva moneda de reserva global que no pertenezca a ningún país en particular marca el último intento por acabar con la dependencia del sistema financiero internacional del dólar estadounidense.

Sin embargo, existe una buena razón por la que dicho esfuerzo no ha funcionado en otras ocasiones: los obstáculos económicos y políticos para una transición de este tipo son enormes.

Desde el punto de vista político, el país con la moneda dominante, es decir, Estados Unidos, puede ser renuente a ceder parte de las ventajas asociadas a ese estatus, dicen economistas.

Las barreras económicas son igual de significativas. El único cambio previo de una moneda internacional a otra en la era moderna (de la libra esterlina al dólar estadounidense) se produjo a lo largo de varias décadas. El salto requirió dos guerras mundiales y cambios significativos en la forma de hacer negocios en el ámbito internacional, así como la participación del sector privado.

A pesar de todos sus defectos, el dólar es atractivo como divisa de reserva debido a que es el lenguaje común en el comercio y las finanzas globales. En otras palabras, su atractivo es proporcional al número de participantes del mercado que lo usan. Durante décadas, el dólar ha sido un medio conveniente de intercambio para todo el mundo, desde los bancos centrales que buscan comprar bonos del Tesoro estadounidense hasta empresas latinoamericanas que exportan materias primas a Asia.

El funcionamiento de una nueva moneda global exigirá, dicen economistas, que alguien subsidie el costo de reunir a compradores y vendedores durante el tiempo necesario para que la moneda cobre atractivo.

Mercados grandes, diversificados y con altos volúmenes de transacciones de una moneda en particular "no aparecen espontáneamente sólo porque el presidente del banco central de China sugiere que sería una buena idea", dice Barry Eichengreen, economista de la Universidad de California en Berkeley.

Es más, una moneda supranacional no tendría usuarios potenciales o país de origen donde pueda ganar aceptación gradualmente.

La Unidad Monetaria Europea (ECU) fue creada como una divisa de integración en 1979 y no tuvo una acogida significativa hasta que esfuerzos concretos (y una buena cantidad de dinero) de las autoridades europeas la transformó en el euro dos décadas después.

Incluso el euro, considerada la innovación monetaria más exitosa del último tiempo, sigue siendo una segunda opción después del dólar en el uso internacional. La crisis financiera global también ha dejado al desnudo los inconvenientes inherentes a una moneda común.

Fuente: WSJ

¿Acabará este rebote con la etapa bajista? Hay riesgo de que no

por John Authers. Financial Times

Ya hemos visto esto antes. En los últimos dieciocho meses, los mercados han subido varias veces tras la presentación de un rescate gubernamental. Pero el intento del lunes fue especial, con el subíndice financiero del S&P 500 subiendo un 17% y el índice general disfrutando de su mejor jornada desde octubre. ¿Será diferente esta vez?

Otra manera de mirar al rally del 23% en el S&P en dos semanas es que simplemente ha devuelto al índice en los niveles en los que estaba después de que el mercado recibiera desastrosamente el discurso de Tim Geithner, secretario del Tesoro, en el que esbozaba los planes de un rescate bancario.

El mercado tiene ahora la pequeña señal que esperaba entonces, y se ha recuperado de la extrema crisis de confianza que sufrió en las últimas semanas.

El sentimiento es mucho mejor ahora entre los activos con más riesgo; el índice MSCI de mercados emergentes ya está en positivo en lo que va de año; y el precio del petróleo se encuentra cerca de máximos de cuatro meses. Éste es el rally más convincente de este mercado bajista.

¿Pero será éste el repunte que acabe definitivamente con ese mercado bajista? El factor crítico aquí es determinar si el plan del Tesoro va a funcionar. El entusiasmo inicial de varias de las grandes gestoras de activos contribuyeron a la buena receptividad del mercado. Pero el plan asume, como sus precedentes, que el problema básico es de liquidez. Intenta poner un precio en activos que no se están negociando. Pero si el problema es realmente de solvencia -de tal manera que los precios actuales de estos activos serían correctos-, la subida no será duradera.

La confianza en los políticos fue otro de los motivos de las ventas masivas de febrero, y el asunto volvió a la palestra la semana pasada, cuando el anuncio del plan del Congreso de elevar los impuestos a los bonus de los banqueros, provocó otra oleada de ventas.

La emoción está en todo lo alto. Wall Street está furioso por este intento, y el Congreso responde con enfado populista. Estas dos emociones podrían hacer descarrilar el actual rally.

Bernanke testifica ante Congreso estadounidense sobre caso AIG

Por Michael R. Crittenden

WASHINGTON (Dow Jones)--El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, apoyó la idea de entablar una demanda para impedir los pagos de US$165 millones en bonificaciones a empleados de American International Group Inc., pero desistió de hacerlo debido al consejo de su equipo legal.

Bernanke dijo el martes que a los abogados les preocupaba una ley del estado de Connecticut, que podría haber permitido a los beneficiarios de las bonificaciones obtener una compensación significativa de manos del Estado por daños punitivos.

La declaraciones del titular de la Fed fueron preparadas con anticipación para ser entregadas ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara baja del Congreso de Estados Unidos.

A pesar de esto, Bernanke sostuvo que el banco central sigue revisando las opciones para recuperar los pagos.

"Cuando fui consciente de estos pagos específicos mi reacción fue que (...) era altamente inapropiado pagar considerables bonificaciones a empleados de la división que había sido la principal fuente del derrumbe de AIG", afirmó Bernanke.

El funcionario tiene previsto hacer frente a críticas y responder a preguntas -junto al secretario del Tesoro, Timothy Geithner- de los legisladores sobre por qué se permitió que AIG, que ha recibido cerca de US$170.000 millones en ayuda estatal, pagara esas bonificaciones de retención.

Bernanke dijo que el Gobierno estadounidense necesita establecer un sistema para hacer frente a situaciones en donde firmas financieras económicamente importantes se encuentren al borde de un derrumbe.

Agregó que la experiencia del Gobierno en el rescate de AIG sugiere la necesidad de una autoridad reguladora única para enfrentar los problemas de firmas financieras de importancia para el sistema.

Bernanke rehusó especificar si la Fed, el Tesoro, o alguna otra agencia deberían recibir esta nueva facultad.

"Si una agencia federal hubiera tenido dichas herramientas el 16 de septiembre, estas pudieron haber sido utilizadas para poner a AIG bajo tutelaje o administración judicial, reducir (la empresa) lentamente, proteger a los tenedores de pólizas, e imponer recortes a acreedores y contrapartes según fuera apropiado", afirmó Bernanke.

Fuente: WSJ

2009/03/23

La banca europea espera con euforia el plan de EEUU

por Expansión.com

Entusiasmo y euforia son las palabras que definen el comportamiento que experimenta hoy al banca europea a las puertas de la presentación del plan de EEUU para liberar activos tóxicos. El sector financiero sustenta los avances de la renta variable con subidas que, en algunos casos, superan los dos dígitos.

El sector financiero se sube hoy a un nuevo bote salvavidas después de conocerse anoche que el secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, presentará esta tarde el plan de EEUU para liberar activos tóxicos del sistema financiero valorado en un billón de dólares.

Esta iniciativa, que pretende incentivar la inversión privada en estos activos, empieza con buen pie: BlackRock, la principal gestora de fondos del país, ya ha confirmado su intención de involucrarse en este proyecto. La buena acogida que genera este nuevo movimiento de fichas del Gobierno de Obama dispara las esperanzas de salir del bacho para el sector más presionado por la crisis.

Dentro de este festival alcista destacan los bancos británicos con subidas, que en su mayor parte superan los dos dígitos. A la cabeza de todos ellos se posiciona ING, cuyo rebote supera el 18% y le coloca como el valor que mejor se comporta del Eurostoxx. Muy de cerca le sigue la aseguradora Aegon que se anota un 15% y se lleva la plata del ránking por revalorizaciones.

Los rivales británicos de ING, Barclays y Lloyds, también hacen lo propio y suman un 9,6% y un 6,5% respectivamente. HSBC se suma a estas subidas, aunque las limita al 3,7%.

Otra de las entidades que mejor acoge el anuncio llegado desde Estados Unidos es el italiano Unicredit, que se cuela entre los primeros puestos del Eurostoxx con subidas del 8,7%. BNP Paribas y la gala Société Génerale cotizan con un rebote del 5,7% y del 5,3%, repectivamente. Algo menos suman Credit Agricole y la aseguradora Axa, pero suman un 3,25% y un 4,6%, respectivamente.

También son importantes las revalorizaciones que experimentan los dos grandes bancos españoles. En el caso de BBVA el rebote alcanza el 4,8%, mientras que para Santander se limitan al 2,69%.

Todas estas subidas son el principal alimiento del paneuropeo Eurostoxx que suma a media sesión un 2,18%, hasta los 2.095 puntos, en la que es su mayor subida intradía desde que el pasado 16 de marzo cerrase con un repunte del 3,26%.

La Fed y los bonos

por John Authers. Financial Times

La sorpresa llegó el miércoles de manos de la Reserva Federal de EEUU. La respuesta de casi todos los mercados fue inmediata. La reacciones del día posterior eran mucho más difíciles de predecir.

Las acciones y los bonos parecen haber experimentado un espectacular ajuste después de que la Fed anunciara que intentaría reducir los tipos a largo plazo comprando bonos del Tesoro. Tras reaccionar a la noticia, los mercados se calmaron con rapidez.

En el mercado de divisas, sin embargo, la sorpresa se prolongaba el jueves y adquiría ímpetu propio. La caída del 3,01 % experimentada por el dólar el miércoles fue la mayor, sobre una balanza comercial, desde la firma del acuerdo Plaza en septiembre de 1985.

El descenso del jueves, al cierre de la jornada en Londres, también fue muy severo: cerca de un 1,9%, según Bloomberg.

El dólar se había recuperado desde el pasado verano gracias principalmente a los efectos del “desapalancamiento”, ya que, en muchos casos, los inversores que estaban liquidando deudas habían vendido activos fuera de EEUU y habían adquirido dólares. La nueva caída del dólar sugiere que los operadores están analizando qué límite puede alcanzar el descenso.

Con un dólar repentinamente más barato, y unos productos estadounidenses, por tanto, más competitivos, otros bancos centrales se encuentran ante un dilema. En la eurozona, donde el Banco Central Europeo sigue enfrentándose a las críticas que le acusan de “actuar con retraso”, los atribulados exportadores podrían sobrevivir sin la subida del 10% experimentada este mes por el euro frente al dólar.

En Japón, donde el Banco de Japón ha intervenido ya en el mercado de bonos, la pregunta es si debe actuar ahora de forma directa para debilitar el yen.

El yen se ha fortalecido un 35% desde julio de 2007, en el albor de la crisis. En los últimos días, ha ganado un 6,6% frente al dólar. Ante la caída en picado de las exportaciones japonesas, la especulación sobre la intervención del Banco de Japón parece lógica.

The Financial Times Limited 2009. All Rights Reserved.

El burbujeante oro

por Financial Times

La bolsa ha hecho un viaje de ida y vuelta al infierno, literalmente: el 6 de marzo, el S&P 500 alcanzó un mínimo de 666 puntos. Desde entonces, la Reserva Federal del EEUU, el Banco de Inglaterra y el banco central suizo han abierto el grifo.

Los mercados de renta variable han subido, al igual que los bonos gubernamentales. El comportamiento de las divisas ha sido peor. El dólar se ha desplomado, también el franco, y la libra esterlina sigue bajo mínimos. Muchos temen que la impresión de tanto dinero altere el ordenado sistema monetario. Todo esto ha encontrado su contrapartida habitual: un repunte del oro.

Sin embargo, si el “final del dinero” se aproxima de verdad, resulta extraño que el aumento del precio del oro no halla sido mayor. En 953 dólares la onza, su valor sigue siendo la mitad del nivel que alcanzó, en términos reales, con su máximo de 1980.

Visto de otro modo, el valor de las reservas globales de oro, unos 900.000 millones de dólares (662.910 millones de euros), supone una cuarta parte de todo el dinero en circulación. Si hay algún valor que parezca vulnerable a un importante recorte especulativo, ese es el oro.

The Financial Times Limited 2009. All Rights Reserved.

Europa Oriental optaría por bajar tasas

(BLOOMBERG) Los principales bancos centrales de Europa Oriental bajarán las tasas de interés a niveles récord este año, optando por contrarrestar así la más profunda recesión desde la caída del comunismo en lugar de defender monedas débiles, según un sondeo de Bloomberg.

La tasa de referencia de Polonia caerá a 3% para fin de año desde el 4%, según pronósticos reunidos por Bloomberg. La tasa de referencia checa bajará a 1.5% desde 1.75% y la de Hungría caerá a 7% desde 9.5%.

Bancos en Polonia, Hungría, la República Checa y Rumania se están viendo forzados a dejar de lado los libros de procedimiento de la política monetaria mientras la región padece la peor declinación económica desde el fin de los regímenes comunistas. Tienen que establecer un equilibrio entre las economías doblegadas por el peso de la crisis y el desplome de las monedas en momentos en que los inversores huyen de los mercados emergentes. Las monedas de la región se encuentran entre las de peor desempeño en los últimos seis meses. De las 26 monedas de países de mercados emergentes analizadas por Bloomberg, el zloty polaco es la que más se ha desplomado, perdiendo el 28% frente al euro.

Fuente: Gestión

El Tesoro detalla planes de compra de activos tóxicos

Por Maya Jackson Randall

Dow Jones Newswires

WASHINGTON (Dow Jones)--El Departamento del Tesoro de Estados Unidos reveló el lunes los detalles de su plan para resolver el problema de los activos tóxicos que están afectando las hojas de balance de los bancos, al tiempo que señaló que el sistema financiero estadounidense "sigue impidiendo la recuperación de la economía".

El Tesoro señaló que una de las principales razones por las que el sistema financiero aún enfrenta desafíos se debe a los "activos heredados" y valores que están comprometiendo la capacidad de los bancos para recaudar capital y su voluntad para aumentar el otorgamiento de créditos.

Según el nuevo programa de inversión publico-privada, el Departamento del Tesoro, la Reserva Federal y el Fondo de Garantía de Depósitos, o FDIC, planean trabajar con inversionistas del sector privado para tratar de reactivar un mercado para estos activos en problemas y reparar las hojas de balance a través de todo el sistema financiero. El Tesoro destacó en documentos entregados el lunes que las restricciones a las compensaciones de ejecutivos incluidas en otros programas de rescate del mercado no se aplicarán a inversionistas privados pasivos que participen en el programa de inversión público-privada.

El Gobierno federal empleará hasta US$100.000 millones en fondos del Programa de Alivio de Activos en Problemas, o TARP, por sus siglas en inglés, y capital de inversionistas privados para generar US$500.000 millones que permitan comprar activos heredados, señaló el Tesoro en los documentos entregados el lunes temprano.

El departamento indicó que, en el futuro, el programa podría ampliarse a US$1 billón [millón de millones].

"Esperar simplemente que los bancos salgan de a poco de los activos heredados supone el riesgo de prolongar una crisis financiera, como en el caso de Japón", según los documentos.

El programa, que consta de dos parte, se hará cargo de préstamos y activos heredados que están afectando las hojas de balance de las firmas del sector financiero.

Bajo el programa de créditos heredados, se crearán fondos de inversión para comprar carteras de activos. El Tesoro entregará un 50% del capital de inversión para cada fondo, mientras que los administradores privados mantendrán el control de la gestión de activos sujetos a la fiscalización del FDIC. El Tesoro señaló que aprobará a hasta cinco administradores de activos "que tengan un historial comprobable de compras de activos heredados", pero que podría considerar añadir más administradores dependiendo de la calidad de las postulaciones recibidas.

Para precalificar como administrador de fondos, el administrador debe presentar una solicitud al Tesoro hasta el 10 de abril. Los bancos identificarán los activos que deseen vender. El FDIC realizará un análisis para determinar la cantidad de financiamiento que está dispuesto a garantizar. El apalancamiento no superara una relación de deuda a capital de 6 a 1. En tanto, quien presente la mayor oferta tendrá acceso a un 50% de financiamiento del capital necesario para su compra de manos del Programa de Inversión Público-Privada.

Los bancos, reguladores, el FDIC y el Departamento del Tesoro determinarán qué activos son elegibles.

"Se espera que una amplia gama de inversionistas participen en el programa de préstamos heredados", señaló el Tesoro en un documento entregado el lunes. "Se fomenta en particular la participación de inversionistas individuales, planes de pensiones, empresas de seguros y otros inversores de largo plazo".

Europa no necesita más estímulo, dice el presidente del BCE

Por Joellen Perry y Stephen Fidler

FRANCFORT—El presidente del Banco Central Europeo (BCE) afirmó que Europa no necesitaba aumentar aún más los gastos para combatir la crisis financiera global, dándoles el respaldo de la entidad a los gobiernos de esos países en su batalla con Estados Unidos sobre cómo superar la peor recesión en una generación.

En una entrevista con The Wall Street Journal, Jean-Claude Trichet señaló que, en lugar de promover nuevas medidas, los gobiernos alrededor del mundo deberían actuar con más rapidez para implementar las medidas que ya han anunciado, refiriéndose en parte a los retrasos y las dificultades del rescate bancario del gobierno estadounidense.

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Europa y Estados Unidos deberían "hacer ahora, tan eficiente y rápidamente como sea posible, lo que se ha decidido", señaló Trichet, encargado de la política monetaria de la segunda economía después de EE.UU. "Nada funcionará hasta que el sector financiero se recupere y esté listo para prestar de manera sostenida. Diría exactamente lo mismo sobre el presupuesto. Las decisiones se han tomado; son muy importantes. ¡Hagámoslo! Lo que se necesita es una rápida implementación y un rápido desembolso".

EE.UU. esperaba presionar a los gobiernos de otros países para que aprobaran, en la reunión del Grupo de los 20 países industrializados y emergentes el 2 de abril en Londres, paquetes de estímulo similares en escala a su plan de US$787.000 millones. Los líderes de la Unión Europea, que se han comprometido a menos de la mitad de la suma aprobada por EE.UU. pese a ser una economía de similar tamaño, han rechazado esa idea, algo que se pudo observar hace 10 días cuando los ministros de finanzas, incluyendo el secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, se reunieron para prepararse para la cumbre.

Los comentarios de Trichet en respaldo a los gobiernos europeos son particularmente significativos porque el presidente del BCE a veces ha sido un crítico severo de sus políticas. También ha cuidado celosamente la independencia del BCE. La Reserva Federal de EE.UU. y periódicamente ha rechazado la presión de los gobiernos para que el banco tenga un papel más activo en la tarea de estimular el crecimiento.

Ante las proyecciones de que la economía mundial se contraerá este año por primera vez en seis décadas, los gobiernos de países como China y el Reino Unido han presentado enormes planes de gastos. Sin embargo, el plan de rescate del sector financiero del gobierno del presidente Barack Obama ha avanzado de forma intermitente desde fines del año pasado, obstaculizado en parte por la oposición política a los crecientes costos del plan y, ahora, por el revuelo provocado por las bonificaciones pagadas a los ejecutivos de las firmas financieras. Los paquetes de estímulo fiscal de otros países han sido anunciados pero no implementados. El reciente plan de 50.000 millones de euros (US$68.000 millones) de Alemania incluye recortes de impuestos sobre los ingresos y la nómina que sólo entrarán en vigor el primero de julio.

Washington y muchos economistas del sector privado han instado a las autoridades europeas a que sean más enérgicas en combatir una recesión continental que probablemente será más profunda que la de EE.UU.

"Cuando se toman en cuenta las medidas del gobierno y la Fed juntas, EE.UU. ha sido claramente más estimulante en sus esfuerzos por reanimar la economía", explica James Nixon, un economista del banco francés Société Générale en Londres. "Las medidas de Europa han sido, podríamos decir, modestas en comparación".

El economista instó a Alemania a gastar más y permitir un mayor déficit para impulsar la demanda por las exportaciones de sus países vecinos. Además, sugirió que el BCE considere comprar deuda soberana o del sector privado como está haciendo la Fed.

Trichet, no obstante, dio a entender que el BCE no hará dichos cambios, aunque es el único banco central sin este tipo de programas y realizó una defensa enérgica de la respuesta de los gobiernos europeos a EE.UU.

"En ambos lados del Atlántico, lo que se ha hecho en materia fiscal corresponde a la gravedad de la situación", sostuvo el banquero central el viernes en su oficina en la sede del BCE.

Trichet también dijo que "peleas inútiles y contraproducentes" sobre distintas posturas se han resuelto.

El Departamento del Tesoro de EE.UU. no quiso comentar.

Fuente: WSJ

El sector privado aportará el 8% de los fondos destinados a los activos tóxicos de EEUU

por Gemma Martínez. Nueva York

El Departamento del Tesoro ha revelado hoy los detalles de la iniciativa con la quiere estabilizar a la banca y que movilizará un máximo de un billón de dólares (736.300 millones de euros). Las entidades que quieran convertir con el Gobierno tendrán que demostrar que pueden captar 500.000 millones por sus propios medios y el plazo para intentar participar en el proyecto finaliza el 10 de abril.

Entidades como Pimco (la mayor gestora de bonos del mundo) y Blackrock ya han manifestado su interés en participar. La Administración otorgará financiación a bajo coste al sector privado, con el apoyo de la Reserva Federal.

La asesora económica de la Casa Blanca, Christina Romer, ha cuantificado el riesgo que será asumido por el Gobierno y por el sector privado. Éste último aportará el 8% de los fondos del programa si se cumple el escenario ideal diseñado por la Administración. Así lo ha asegurado Romer en una entrevista con la cadena de televisión ABC.

La intención de la Administración de Barack Obama es que la adquisición de activos tóxicos (deuda respaldada por hipotecas y préstamos) sean adquiridos por fondos de inversión público-privados, que serán administrados por gestores privados. Éstos se encargarán de fijar los precios de fijación de los activos, a través de un sistema de subastas.

Los activos a adquirir serán determinados por los bancos, el Tesoro y el Fondo de Garantía (Fdic). Éste, al mismo tiempo, se encargará de determinar qué parte de estos activos estarán respaldados por el Gobierno a través de un análisis específico para cada caso.

"Esta fórmula es la mejor alternativa para que los bancos pueden trabajar de forma gradual para eliminar estos activos de sus libros. Es mejor que si las compras fueran efectuadas directamente por el Gobierno", ha indicado el Tesoro. Esperar que los bancos hicieran esta limpieza por sí mismos " hubiera supuesto un riesgo de que la crisis financiera se alargara, como sucedió con la crisis de Japón", señala el departamento dirigido por Timothy Geithner.

El Tesoro espera captar el interés de inversores individuales, planes de pensiones y aseguradoras, principalmente, con vocación de invertir a largo plazo.

El plan utilizará programas públicos ya existentes y otros de nueva creación, como la constitución de una entidad dependiente del Fondo de Garantía de Depósito, que se encargará de subsidiar la adquisición de los préstamos. La iniciativa ha sido bautizada como Programa Público Privado para la compra de activos tóxicos.

La Administración defiende que para fomentar la participación del sector privado los bancos que participen no podrán tener límites muy estrictos a la retribución de sus altos ejecutivos, como lo establecidas por el Congreso para la aseguradora AIG, cuyos bonus estarán gravados en un 90% si el texto legal aprobado por la cámara baja es ratificado por el Senado.