2010/11/18

Reino Unido dice estar listo para ayudar a Irlanda

BRUSELAS (EFE Dow Jones)—Reino Unido está preparado para ayudar a Irlanda a solucionar los problemas de su creciente deuda, señaló el miércoles el ministro de Economía británico, George Osborne.

Osborne realizó estas declaraciones a la prensa a su llegada a la reunión de ministros de Finanzas de la Unión Europea y unos minutos después de que el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, confirmara que se ha pedido la ayuda de Reino Unido para que participe en el paquete de asistencia financiera para Irlanda.

"Va en el interés nacional de Reino Unido el que la economía irlandesa tenga éxito y que tengamos un sistema bancario estable", indicó.

Rehn dijo que la cuestión de la contribución de Reino Unido surgió porque los bancos de este país han hecho grandes créditos a Irlanda.

Anoche, los ministros de Finanzas de la eurozona —de la que no forma parte Reino Unido— acordaron que una misión de la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo debería visitar Irlanda para preparar el paquete de ayuda financiera para el país y su sistema bancario.

El paquete de rescate podría ascender hasta los EUR100.000 millones, aunque aún no está claro cuánto quieren los gobiernos de la eurozona que aporte el británico. A diferencia de Suecia y Polonia --que también están fuera de la eurozona--, Reino Unido no ha accedido a realizar aportaciones al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.

Rehn dijo que es urgente llegar a un acuerdo sobre los pasos que debe tomar Irlanda para atajar los problemas de sus bancos.

"Llevamos un tiempo enfrascados en conversaciones técnicas y tras esta reunión se han intensificado", dijo. "Ahora es de vital importancia establecer el estado real de la situación de la banca en Irlanda. La situación es ciertamente muy urgente y muy grave, así que no hay tiempo que perder".

2010/11/17

China limita la compra de propiedades por parte de extranjeros para frenar los ingresos de capital

Por Esther Fung y Joy C. Shaw

SHANGHAI (Dow Jones)--China anunció el lunes medidas que buscan frenar el ingreso de capitales de gran movilidad y reducir las presiones inflacionarias a través de la restricción de compras de propiedades por parte de personas y compañías extranjeras en el país, si bien los analistas esperan que los efectos sobre los ingresos de capitales sean escasos.

En un comunicado conjunto con el Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano-Rural, la Administración Estatal de Comercio Exterior dijo el lunes en su sitio web que las compañías extranjeras sólo pueden comprar propiedades comerciales para uso propio.

También se reforzaron normas existentes que limitan a una unidad por persona la compra de propiedades residenciales por parte de personas extranjeras para uso propio.

Aunque los analistas aún no están seguros sobre cómo estas reglas, que carecen de detalles, podrían impactar el mercado de propiedades comerciales de China, las medidas tendrían un débil efecto sobre los ingresos de capitales, ya que los compradores extranjeros de propiedades todavía representan una pequeña parte del mercado de bienes raíces.

Si bien los extranjeros tienen una mayor presencia en el sector comercial, comparados con el sector residencial, analistas dijeron que es poco probable que estas medidas administrativas, que recuerdan otras adoptadas en 2006, tengan un gran impacto en la enorme liquidez del mercado interno.

En julio de 2006, China anunció restricciones a la compra de propiedades por parte de extranjeros y dijo que sólo quienes han vivido en China por más de un año podían comprar una propiedad para uso propio, lo que fue repetido en la declaración actual, aunque la última no ha entrado en vigor efectivamente.

Los precios de las propiedades en China subieron un 0,2% en octubre respecto del mes anterior, tras registrar un incremento de un 0,5% en septiembre. Los precios registraron un alza interanual del 8,6% en octubre, en comparación con el aumento del 9,1% registrado en septiembre.

Aunque el alza interanual de octubre fue la sexta consecutiva en seis meses de crecimiento negativo, el declive podría ser demasiado gradual para las autoridades.

El índice de precios al consumidor de China subió un 4,4% en octubre, acelerándose respecto del alza de un 3,6% en septiembre a su nivel más alto en dos años.

2010/11/16

Los economistas dudan que la Fed extienda la relajación cuantitativa

Por Phil Izzo

Economistas encuestados por The Wall Street Journal no creen que la Reserva Federal expanda sus compras de bonos del Tesoro de Estados Unidos más allá de sus actuales y controvertidos planes, pese a que los expertos ven un crecimiento débil durante los próximos dos trimestres, con el desempleo cerca del 9% a lo largo de 2011.

Los 49 participantes en esta encuesta mensual (no todos respondieron todas las preguntas) ven a la economía de EE.UU. expandiéndose a una tasa estacional anual de 2,4% en el trimestre actual, con tan sólo un crecimiento de 2,6% en la primera mitad del próximo año, apenas suficiente como para reducir el desempleo.

Para la segunda mitad, prevén que el crecimiento se acelera a poco más de 3%. El Producto Interno Bruto, es decir el valor de todos los bienes y servicios producidos en EE.UU., creció 2% a una tasa anual estacionalizada en el tercer trimestre.

La Fed dijo que tiene planes de comprar cerca de US$900.000 millones en bonos hasta junio de 2011, cerca de US$300.000 millones reinvirtiendo lo recaudado en hipotecas del portafolio de la Fed que se han vencido y otros US$600.000 millones a lo largo de los próximos seis meses para tratar de revivir la economía.

Esto marca una segunda ronda de compras de bonos por parte de la Fed, en un esfuerzo por reducir las tasas de interés, una política conocida como relajamiento cuantitativo.

Aunque el plan fue aplaudido por algunos como una forma de evitar una caída en la inflación y un mayor desempleo, ha sido criticado por muchos otros. Los detractores advierten que esta política podría crear más inflación de la que la Fed desea o podría reducir el valor del dólar en los mercados de divisas mundiales, lo cual causaría la ira de sus socios comerciales.

La encuesta descubrió que en promedio, los economistas esperan que la Fed compre US$909.000 millones en total, lo que sugiere que no ven una tercera ronda de relajamiento cuantitativo.

"Una mejora en la economía y las críticas limitarán el programa", indicó Jim O'Sullivan de MF Global.

La Fed ha dicho que revisará sus planes de compra de bonos a medida que evolucione la recuperación económica.

Entre los economistas encuestados, 29 de ellos dijeron que habrían votado en contra de la ronda más reciente de compra de activos si ellos fueran miembros del Comité de Mercados Abiertos de la Fed, el panel que fija las políticas del banco central, 16 de ellos habrían apoyado la medida.

"El Comité de Mercados Abiertos necesita navegar hábilmente alrededor de las crecientes olas de inflación en los turbulentos mares políticos cuando la relajación cuantitativa regrese al puerto", dijo Stuart Hoffman de PNC Financial Services.

El impacto económico de las medidas de la Fed probablemente será modesto, dijeron los economistas. En sus cálculos, el PIB subirá en 0,2 puntos porcentuales en 2011 debido a la compra de bonos por parte de la Fed y la tasa de desempleo bajará en menos de 0,1 puntos porcentuales.

Ellos esperan que el desempleo, que ahora se encuentra en 9,6%, caiga a 8,9% a finales de 2011. "El impacto en los mercados laborales será virtualmente invisible", dijo Dana Johnson del Comerica Bank.

Los economistas creen que el índice de precios al consumidor será 0,3 puntos porcentuales mayor en diciembre de 2011 que lo que habría sido sin una segunda ronda de relajamiento cuantitativo. Pero aún anticipan una inflación modesta, prediciendo que los precios al consumidor a finales de 2011 estarán apenas 1,9% por encima de los niveles del mismo período del año anterior.

Aunque los economistas esperan un crecimiento lento y un desempleo alto, le otorgaron una probabilidad de 16% a una nueva recesión en los próximos 12 meses, su nivel más bajo desde la encuesta de mayo y un descenso frente al 21% de septiembre.

Fuente: WSJ

2010/11/15

El presupuesto irlandés, en el centro del drama

Por Charles Forelle

BRUSELAS—El primer acto de la crisis de deuda soberana en Europa tuvo a Grecia luchando por reparar sus finanzas antes de que una enorme redención de bonos vaciara sus arcas. Su gobierno no podía encontrar una solución y tuvo que pedirles 110.000 millones de euros (US$151.000 millones) a otros países de la zona euro y el Fondo Monetario Internacional.

La cortina subió para el segundo acto, en Irlanda, y la trama es muy distinta. Un complejo cálculo determinará cómo termina, y no sólo para Irlanda. El hecho de si la Isla Esmeralda recibirá un rescate, y cuándo y cómo funcionará, dirá mucho sobre cómo Europa resolvería una crisis de deuda soberana en un país más grande, como España. Si no maneja bien la situación, podría desatar una renovada agitación en los mercados financieros. En este acto, muchos en Europa preferirían que Irlanda recibiera un rescate a arriesgarse a ver cómo el sentimiento negativo del mercado envenena la península ibérica.

[Irlanda]

La respuesta de Irlanda hasta ahora: gracias, pero no necesitamos el dinero en este momento. Desde el primer ministro Brian Cowen para abajo, los funcionarios irlandeses insisten en que el gobierno está "financiado completamente" hasta mediados de 2011. Por lo tanto, afirman, el país tiene siete u ocho meses más antes de que le quede tan poco efectivo que necesite un rescate.

Irlanda no necesita pagar un bono soberano hasta noviembre próximo. Eso significa que el factor clave es la velocidad a la que el gobierno deficitario gasta su efectivo, que ascendía a 22.400 millones de euros a fines de octubre. El dinero podría durar ocho meses, pero sólo si muchas cosas salen bien.

En primer lugar, Irlanda necesita controlar el ritmo de pérdida de efectivo. Entre noviembre de 2009 y junio de 2010, el gobierno consumió 11.000 millones de euros. El ministro de Finanzas, Brian Lenihan, ha prometido reducir el presupuesto de 2011 en 6.000 millones de euros con respecto a proyecciones anteriores mediante aumentos de impuestos y recortes de gasto. Los detalles serían revelados en las próximas semanas.

En segundo lugar, la economía necesita recuperarse. Las proyecciones de presupuesto del gobierno suponen que el Producto Interno Bruto crecerá 1,75% el año próximo y que el desempleo se mantendrá estable en alrededor de 13%. Si esas estimaciones son demasiado optimistas, afirma Constantin Gurdgiev, un profesor de finanzas de Trinity College en Dublín, el presupuesto se verá afectado por una caída de la recaudación tributaria y un alza en el gasto en programas automáticos de bienestar social.

En tercer lugar, los nerviosos mercados de deuda deben cooperar. En septiembre, Irlanda canceló las subastas de bonos del Tesoro a corto plazo para el resto del año. Sin embargo, 6.000 millones de euros en títulos vencerán entre enero y abril, por lo que Irlanda necesita volver al mercado para postergar esos pagos.

Las cuentas dejan poco lugar para ilusionarse. Si Lenihan no puede imponer la ley de presupuesto, e Irlanda gasta y grava impuestos a los niveles del año pasado, gastará 11.000 millones de euros para fines de junio. Una redención de pagarés a principios de 2011 podría costar 3.000 millones de euros. La incapacidad de postergar vencimientos de valores del Tesoro consumiría 6.000 millones de euros. Eso significa 20.000 millones de euros, y sacar eso de las reservas de efectivo de 22.000 millones de euros sería demasiado.

Esta semana y la próxima, Europa tendrá los ojos puestos en el Parlamento de Irlanda.

Fuente: WSJ