2009/02/16

El Congreso de EE.UU. aprueba el plan de estímulo de US$787.000 millones

Por Greg Hitt y Jonathan Weisman

WASHINGTON – El Congreso estadounidense aprobó una ley de estímulo económico por US$787.000 millones diseñada para atacar a la peor crisis económica desde la Gran Depresión, entregándole así una victoria al presidente Barack Obama.

Más temprano, la Cámara baja votó 246 a 183 a favor del proyecto, mientras que un legislador demócrata se abstuvo de emitir su voto.

Como se esperaba, la votación se realizó dentro de líneas partidistas. Ningún legislador republicano votó a favor del paquete de recuperación. Hubo siete demócratas que se opusieron al proyecto, número menor a los 11 que habían votado en contra de una versión previa de la propuesta.

En la Casa Blanca, Obama dijo que el paquete es necesario para "encender el gasto por parte de negocios y consumidores" y "hacer las inversiones necesarias para un crecimiento y prosperidad económica duraderos". Sin embargo, enfatizó que la ley es "sólo el principio" de lo que finalmente será "un largo y difícil proceso de recuperación de nuestra economía".

El gobierno calcula que el paquete creará o preservará 3,5 millones de trabajos. Funcionarios estatales reconocen que renunciaron a ciertas medidas económicas para lograr que la medida fuera aprobada. Una medida de US$70.000 millones que protegería a 26 millones de estadounidenses de clase media del impuesto mínimo alternativo, un gravamen diseñado originalmente para golpear a los más ricos, fue mantenido por solicitud de los senadores republicanos que respaldaron la medida, pero tiene poco impacto en la economía.

Cerca de un tercio del paquete se dedicó a recortes de impuestos para negocios e individuos, incluyendo una salvedad impositiva de US$400 sobre el sueldo de los trabajadores, una expansión del crédito para aquellos que tienen hijos y exenciones más generosas para gastos universitarios. Nuevos incentivos serían suministrados para compras de autos y compras de casas por primera vez, entre otras cosas.

El gobierno financiará el paquete. Miles de millones de dólares fluirán durante los próximos dos años para expandir los beneficios de desempleo, ayudar a los estados con déficits presupuestales a evitar recortes en educación y salud para los pobres e inversiones para crear empleos en investigación científica, tecnologías ecológicas y construcción de carreteras, entre otras cosas.

David Obey, demócrata por Wisconsin, dijo que el proyecto de gastos es vital ya que otros remedios tradicionales se han agotado. "La única bala que queda es la política fiscal", afirmó.

El proyecto estará listo el lunes o martes para la firma del presidente Barack Obama, según un documento publicado por la Casa Blanca.

"Necesitamos mostrar a la población estadounidense que podemos salvar y crear empleos", afirmó el senador Richard Durbin, demócrata por Illinois, durante un discurso en el piso del Senado.

El proyecto, de más de mil páginas, contiene varias provisiones dirigidas a grandes segmentos de la economía. Incluye miles de millones de dólares en nuevos programas de gastos y recortes impositivos.

Según los republicanos, el paquete de estímulo está inflado y no resolverá los problemas económicos del país. Afirman que se crearán nuevos programas de gastos que incrementarán sustancialmente el tamaño del déficit presupuestario federal.

Fuente: WSJ