2010/04/23

Los ojos de los mercados están puestos en el yuan

Por Tom Lauricella, Alex Frangos y Mark Gongloff

Cuando China permitió la apreciación del yuan en 2005, la decisión tomó por sorpresa a los inversionistas y estremeció a los mercados financieros.

Ahora, sin embargo, el mercado anticipa una revaluación de la moneda y la pregunta es si la medida podría pasar casi desapercibida.

La respuesta es no. El alza del yuan podría impulsar a otras divisas asiáticas, levantar los precios de las materias primas y perjudicar a los bonos del Tesoro de Estados Unidos. La bolsa china, que está muy enfocada en el mercado interno, también podría recibir un empujón.

Ahora que China se ha convertido en una potencia económica mundial, absorbiendo bienes básicos y dominando las exportaciones, los efectos de la revaluación del yuan podrían incluso ser mayores que en 2005.

Aunque algunos movimientos del mercado se han anticipado al cambio, los precios del petróleo y las cotizaciones de las monedas asiáticas están en alza, algunos analistas creen que el mercado podría subestimar la dimensión de una revaluación.

Los mercados cambiarios han esperado durante meses una apreciación del yuan en torno al 3% este año. Eso significa que el dólar caería a alrededor de 6,6 yuanes por unidad frente a los actuales 6,8 yuanes, un nivel desde el cual la divisa china no se ha movido desde 2008. En ese momento, la crisis financiera obligó a las autoridades chinas a detener la apreciación paulatina de 21% que había tenido lugar desde 2005.

Los analistas de Morgan Stanley, sin embargo, creen que China podría contemplar un alza de 4% o 5% del yuan en varios pasos y dejaría a la divisa en 6,17 unidades por dólar a finales de 2011. Los analistas de Barclays Capital, por su parte, también aguardan una apreciación gradual en torno a 5% este año.

Hasta el momento, los mercados apuestan a un movimiento paulatino y moderado.

El mercado ha esperado un alza modesta del yuan "por bastante tiempo", indica Richard Gao, gestor de portafolio para Matthews Asia Funds.

Una apreciación importante del yuan podría ser interpretada como una señal de que el gobierno estaría pisando el freno con fuerza para enfriar el crecimiento económico. Eso podría hacer que los inversionistas huyan de los activos considerados más riesgosos, como las materias primas y los mercados emergentes. "Si China anuncia una flotación libre del yuan frente al dólar, eso cambiaría todo el análisis", afirma Nicholas Bohnsack, estratega de Strategas Research Partners. Agrega, en todo caso, que "la probabilidad de que ello ocurra es extremadamente baja".

Los analistas cambiarios de HSBC creen que China tomará una decisión respecto a su moneda durante el actual trimestre. Pero si espera más tiempo, el segundo semestre estará repleto de reuniones internacionales y habrá elecciones legislativas en EE.UU., por lo que podría parecer que China estuviera sucumbiendo a la presión externa.

Sophia Drossos, codirectora global de estrategia cambiaria de Morgan Stanley, dice que las monedas de Corea del Sur, Taiwán y Malasia estarían entre las más beneficiadas de un aumento del yuan.

El euro, en cambio, "correría el mayor riesgo". Luego de comprar dólares al intervenir en los mercados cambiarios, los bancos centrales diversifican sus portafolios al vender parte de esos dólares y adquirir euros.

Una menor necesidad de intervenir se traduciría en menos dólares y, por ende, una menor demanda de euros.

Las monedas de los países que dependen de las exportaciones de materias primas, como por ejemplo el dólar australiano, también podrían verse perjudicadas.

Fuente: WSJ