2011/05/13

El dólar sale de su letargo, pero es pronto para festejar

Por Tom Lauricella

Es posible que el dólar esté disfrutando por fin de un respiro tras una mala racha de meses de duración. Sin embargo, los optimistas no deberían apresurarse a descorchar el champán.

Desde caer el miércoles de la semana pasada a su punto más bajo de este año frente al euro, el dólar se ha recuperado casi 4%, su mayor alza en un lapso de seis días desde noviembre. Por ahora, este repunte, según los corredores, tiene más que ver con un revés en las apuestas excesivamente pesimistas contra la moneda y vaivenes en los mercados de materias primas, que cualquier cambio en la opinión dominante de que el dólar afronta retos considerables.

En las últimas semanas, los inversionistas alcanzaron niveles sin precedentes de pesimismo respecto al dólar, lo que pudo verse en la cantidad de posiciones al descubierto o apuestas a la caída de la moneda. Eso fue especialmente el caso con el euro. A medida que la moneda estadounidense empezó a subir la semana pasada, muchos operadores se apresuraron a deshacerse de esas apuestas.

Además, los corredores aseguran que hubo una especie de espiral de retroalimentación entre las monedas y los commodities, donde los enormes declives en los precios de la plata y el petróleo, coincidieron con una carrera a corto plazo por comprar dólares. Esas fuerzas probablemente ya hayan pasado su cúspide.

El vínculo entre los commodities como la plata y el dólar se ha fortalecido recientemente, en parte porque los corredores a corto plazo están participando cada vez más en ambos mercados, el de materias primas y de divisas. Por ejemplo, los inversionistas individuales con altos niveles de apalancamiento están haciendo apuestas por "pares" que involucran plata u oro por un lado de una operación y el dólar por el otro. Muchos corredores electrónicos ofrecen la posibilidad de negociar estos pares, lo que permite que un operador apueste simultáneamente a un incremento en los precios de la plata y un dólar más débil. Esta clase de operaciones proporcionaría una relación directa entre los movimientos en los dos mercados.

En Integral Development, que opera redes de corretaje electrónico, la actividad en esta clase de operaciones se ha triplicado frente a hace tres semanas, dice Harpal Sandhu, presidente de Integral. "Los volúmenes registran un alza significativa", añade.

Algunos corredores también dicen que el aumento de los requisitos de márgenes más altos en la plata pueden haber forzado a los corredores a recaudar efectivo deshaciéndose de sus apuestas a corto plazo por el dólar. Y dado que los precios de los commodities están fijados en dólares, un repunte de la moneda puede encarecer estas materias primas para los compradores que utilicen otras divisas.

"La dificultad es saber de qué manera funciona la causalidad: si la caída de los precios de los commodities causó el auge del dólar o si el auge del dólar hizo que cayeran los precios de los commodities", plantea Adam Cole, estratega cambiario de RBC Capital Markets.

Algunas de las compras de dólares han sido impulsadas por las renovadas preocupaciones en Europa que han afectado al euro sobre la crisis de deuda soberana en el bloque económico, y las menores expectativas de que el Banco Central Europeo suba las tasas de interés después de su última reunión.

Pero las fuerzas principales que han impulsado la gran caída del dólar desde el inicio del año se mantienen intactas. Tal vez la más importante es que los inversionistas piensan en general que es poco probable que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) eleve las tasas de interés a corto plazo. Esa impresión se ha visto reforzada por una desaceleración en la recuperación de la economía de EE.UU. Además, ha habido pocos signos de progreso en lo que respecta al enorme déficit presupuestario de EE.UU.

Mientras que el euro está por debajo de su máximo intradiario de este año de US$1,4939, alcanzado el miércoles pasado, todavía está muy por encima de su mínimo de US$1,2875 a mediados de enero y un 6,5% frente al dólar en lo que va de año. El jueves por la noche, el euro se negociaba a US$1,4239, un alza frente a los US$1,4201 del miércoles.

"Hay pocas razones para esperar que sea una escalada sostenida del dólar", dijo Robert Sinche, jefe global de estrategia cambiaria de RBS Global Banking and Markets.

Fuente: WSJ