2011/04/06

La intervención del yen está dando resultados

Por Alex Frangos

La caída del yen a su mínimo nivel contra el dólar y el euro en varios meses es la más reciente señal de que la intervención coordinada posterior al terremoto está dando resultados.

¿Pero cuán bajo puede caer el yen?

El dólar valía más de 85 yenes durante la jornada bursátil asiática el miércoles. Ello representa una caída de 7% para el yen desde que el Grupo de Siete países industrializados anunció una oleada coordinada de venta de yenes el 18 de marzo, y su nivel más débil desde septiembre, después de que Japón intervino en los mercados cambiarios por sí solo.

En la mañana de actividad bursátil en Estados Unidos el miércoles, el dólar estaba en 85,34 yenes, frente a 84,83 yenes al cierre del martes en Nueva York. El euro estaba en 121,89 yenes, frente a 120,64 yenes. Un día antes de la intervención, el dólar estaba en torno de 78,95 yenes y el euro estaba en alrededor de 110,70 yenes.

"Esto se está perfilando como uno de los episodios más exitosos de intervención hasta la fecha", dice Sean Callow, estratega de monedas de Westpac Institutional Bank en Sidney.

El euro tocó un máximo de 11 meses contra el yen en Asia el miércoles, gracias a las sendas cada vez más divergentes que establecen las autoridades monetarias en las dos economías. Hay una expectativa generalizada de que el Banco Central Europeo eleve las tasas de interés en una reunión el jueves. Las mayores tasas de interés suelen atraer capital.

La caída constante del yen en las últimas semanas está alentando el punto de vista de que la moneda japonesa finalmente se está acercando a un punto de inflexión después de más de dos años de fortalecimiento contra el dólar que ha frustrado a compañías y políticos japoneses.

Analistas de Nomura dicen que la barrera de 85 yenes "podría ser significativa desde una perspectiva de mediano plazo y no nos sorprendería ver una tendencia de mayor debilidad del yen". Nomura ha revisado su pronóstico para reflejar una mayor caída en el yen, prediciendo que el dólar valdrá más de 90 yenes en 2012 conforme suban las tasas de interés de EE.UU. y las tasas de Japón sigan firmes.

El éxito de la intervención se explica en parte por operadores que ahora ven un techo para la fortaleza del yen, gracias a las amenazas de futura intervención. Eso ha dado a los inversionistas confianza para acumular apuestas en el arbitraje cambiario, o carry trade, por el cual toman prestados yenes a muy bajas tasas de interés y convierten ese dinero en monedas de mayor rendimiento como el dólar australiano, que también está cotizando en máximos recientes contra el yen.

Otro factor es la condición económica debilitada de Japón. Los apagones rotativos y los temores nucleares están perjudicando la manufactura y las exportaciones. Incluso un descalabro temporario podría reducir la demanda de compañías de autos, tecnología y maquinarias de convertir a yenes el dinero ganado en el exterior.

Standard Chartered redujo su pronóstico de crecimiento de Japón en 2011 de 1,9% a 0,7% este año. Elevó su pronóstico de 2012 por expectativas de una fuerte recuperación en forma de V, y cree que el dólar se afirmará a 90 yenes.

Entretanto, el Banco de Japón tenía previsto reunirse el jueves y está bajo presión para relajar aún más las condiciones monetarias expandiendo su programa de compra de activos para apoyar la recuperación post sísmica de Japón, una medida que naturalmente deprimiría el yen al aumentar su oferta.

Un yen más débil debería ayudar a atribuladas compañías japonesas a lidiar con los efectos de los desastres natural y nuclear, y la continua escasez de suministros y electricidad.

El director general de Hitachi Ltd., Hiroaki Nakanishi, dijo el miércoles que un dólar que cotice a más de 85 yenes es un "estado más natural". Dijo que Hitachi diseñó su presupuesto para el ejercicio fiscal que apenas comenzó este mes, basado en la expectativa de que el dólar cotizaría a 80 yenes.

"Para nosotros, sería favorable que el dólar se mantuviera estable en la banda de 85 yenes a 90 yenes", dijo.

El éxito de largo plazo de las intervenciones monetarias debe medirse en meses y años, en vez de semanas. Podría resurgir un yen más firme, como ocurrió cuando Japón intervino unilateralmente en los mercados cambiarios en septiembre. Tras un debilitamiento inicial, el yen repuntó, fortaleciéndose aún más a las pocas semanas que el momento inicial de la intervención.

De hecho, no todos esperan que el yen caiga. Deutsche Bank sigue recomendando que los clientes apuesten a un yen más fuerte contra el dólar, suponiendo que la divisa estadounidense volverá a caer por debajo de 80 yenes en los trimestres venideros gracias en parte a los superávits persistentes del comercio y de la cuenta corriente de Japón.

Fuente: WSJ