2009/01/21

Geithner sería confirmado al frente del Tesoro de EE.UU.

Por Deborah Solomon

WASHINGTON—Timothy Geithner abogará por un enfoque amplio y agresivo para frenar la crisis financiera de Estados Unidos cuando se presente hoy en el Capitolio para ser confirmado como el nuevo secretario del Tesoro. Además, intentará convencer a los legisladores de que simplemente se equivocó cuando no pagó algunos impuestos hace unos años.

En su audiencia ante el Congreso, el actual presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York probablemente será bombardeado con preguntas sobre sus tropiezos tributarios y su rol en el diseño del paquete de rescate del gobierno de George W. Bush.

Algo que juega a favor de Geithner es que los legisladores no parecen encaminados a descarrilar su confirmación en un momento en que la economía tambalea y la crisis financiera empeora.

"Esta crisis se está deteriorando día a día y hace falta tener a alguien en el Tesoro que tome las decisiones necesarias para tratar de pararse frente la crisis, silenciarla, frenarla y domarla", señaló el senador republicano de New Hampshire, Judd Gregg.

No se espera que Geithner critique directamente al gobierno de Bush por su gestión de la crisis, pero tratará de distanciarse asegurándoles a los legisladores que el gobierno de Obama planea una estrategia más amplia, abierta y mejor orientada, según asesores del Congreso y otros funcionarios.

Es probable que Geithner sea presionado por algunos miembros del Comité de Finanzas del Senado por su papel en la respuesta del gobierno hasta ahora, incluyendo el Programa de Alivio de Activos en Problemas (TARP) de US$700.000 millones. Entre otras cosas, le pedirán que explique de qué forma su estrategia diferirá de la del secretario del Tesoro saliente, Henry Paulson. Sus funciones como gobernador de la Fed de Nueva York le permitieron trabajar de cerca con Paulson.

Los temas que seguramente surgirán incluyen la decisión del gobierno de dejar que Lehman Brothers quebrara y los rescates de Citigroup Inc., American International Group y Bank of America, financiados con dinero de los contribuyentes.

Intervención clave

"Hay cuestiones más allá de ésta que van a ser consideradas además del asunto de los impuestos", aseguró el senador republicano de Iowa, Charles Grassley. "Creo que algunas personas tienen preguntas acerca de su participación en el TARP y quizás sobre algunas de las fusiones y asuntos que ha impulsado desde que se desataron los problemas".

Grassley, el miembro republicano de mayor rango en el Comité de Finanzas, dijo que no decidiría si respaldar o no la nominación de Geithner hasta después de la audiencia.

Se espera que Geithner les asegure a los legisladores que hizo todo lo posible para salvar a Lehman pero que la Fed no tenía autoridad para inyectar dinero en el atribulado banco de inversión y que nadie estaba dispuesto a comprarlo.

Pocos consideraban la confirmación de Geithner como algo más que un trámite hasta que surgieron evidencias de que no había pagado más de US$34.000 en impuestos de seguridad social y cuidado médico cuando trabajaba para el Fondo Monetario Internacional.

Después de que el Servicio de Impuestos Internos de EE.UU. le hiciera una auditoría en 2006 y descubriera errores en su declaración de impuestos, Geithner los corrigió para los años 2003 y 2004. Geithner esperó a que Obama lo nominara como secretario del Tesoro hace unos meses para pagar los impuestos que debía de 2001 y 2002.

Se espera que Geithner hable hoy de los planes del gobierno de Obama para renovar los esfuerzos de rescate e implementar una serie de nuevas medidas para resolver la crisis financiera, incluyendo un plan de entre US$50.000 millones y US$100.000 millones para ayudar a los propietarios de viviendas que enfrentan un posible embargo. El gobierno también está considerando un plan para deshacerse de los activos tóxicos que están paralizando a muchas instituciones financieras, posiblemente creando un banco estatal que compre las inversiones y los préstamos incobrables que están detrás de las enormes pérdidas que los bancos estadounidenses continúan reportando.

—Corey Boles y Patrick Yoest contribuyeron a este artículo.