2010/09/27

Las tasas de default corporativo en EE.UU., cerca de los niveles de 2008

Por Mike Spector

The Wall Street Journal

La gran tormenta de deuda ha pasado. Y los daños han sido mucho menores de los previstos.

Las tasas de cesación de pagos corporativas podrían bajar a los mismos niveles que precedieron a la crisis financiera de septiembre de 2008, lo que constituiría un rápido giro para la suerte de las compañías estadounidenses con mayores problemas financieros.

La tasa de default en EE.UU. debería caer por debajo de 3% para finales de año, según Moody´s Investors Service, una sorprendente caída frente a su máximo de 14,6% de noviembre 2009 e incluso por debajo de la tasa de 3,1% de agosto de 2008.

La tasa de cesación de pagos mide el porcentaje de compañías con calificación de crédito "basura" que no pudieron cumplir sus obligaciones de deuda durante un período de 12 meses. La caída de la tasa sugiere que la sangría corporativa desatada por el colapso de Lehman Brothers Holdings Inc. ha finalizado o está a punto de acabar. Esta circunstancia podría ser favorable para el mercado laboral, afectado por el colapso de compañías como Circuit City Stores Inc., Linens N´Things Inc., y Nortel Networks Corp. en 2008 y 2009.

"A corto plazo, parece que hemos superado la última oleada de reestructuraciones, más rápido de lo anticipado", dijo Michael Henkin, codirector de reestructuración en Jefferies & Co. "La recuperación fue bastante rápida, y los mercados de capital han solucionado muchas preocupaciones sobre las cesaciones de pagos corporativas".

Una economía que se ha estabilizado —si bien provisionalmente— ha ayudado a muchas compañías en dificultades financieras a mantenerse a flote. Otro importante factor ha sido las bajas tasas de interés fijadas por la Reserva Federal de EE.UU. Las tasas han aumentado el apetito de los inversionistas por deuda de altos retornos, lo que les ha llevado a comprar bonos de compañías con riesgos a un ritmo récord. Si bien los fundamentos económicos o una doble recesion podrían a la postre hacer caer a estas firmas, por ahora tienen amplio acceso a capital.

Este acceso se concentra en las compañías lo suficientemente grandes para emitir bonos al público. Los negocios más pequeños, que dependen principalmente de los préstamos bancarios, aún atraviesan muchas dificultades para obtener capital.

Fuente: WSJ