2011/09/02

Las medidas de crédito de China afectan al cobre

Por Chuin-Wei y Tom Orlik

El banco central de China atravesó un importante nivel de soporte para los precios del cobre.

El metal rojo registró fuertes pérdidas en las ventas generalizadas recientes de commodities, en las que los precios cayeron de un máximo cercano a US$4,50 la libra, a fines de julio, a un mínimo de US$3,97 la libra en la segunda semana de agosto. El factor que impidió una caída peor fue el continuo y sólido crecimiento de China. La segunda economía mundial genera cerca del 40% de la demanda global del metal.

Pero las compras de cobre chinas, así como de soja, acero y otros bienes básicos, han sido impulsadas por más que solo la demanda fundamental. Desde fines de 2010, los operadores de bienes básicos locales han usado las importaciones como una forma de aprovechar las restricciones al crédito del gobierno. Los operadores usan los pocos fondos que tienen como garantía para obtener cartas de crédito de bancos que usan para financiar las importaciones de cobre.

El cobre es luego vendido o usado para obtener préstamos en yuanes, y el operador usa los fondos hasta que deba pagar la carta de crédito al cabo de unos meses.

Es la necesidad de crédito, no la demanda de cobre, lo que motiva la transacción. Los fondos se usan para, por ejemplo, realizar proyectos de bienes raíces. El metal se almacena en bodegas en Shanghai, donde los inventarios se elevaron a niveles récord a principios de este año.

Ahora, al parecer, Beijing se hartó de esta situación. El Banco Popular Chino decretó el viernes que los bancos deben poner una parte de las garantías originales que respaldan a las cartas de crédito en cuentas de reserva de bajo rendimiento, en vez de permitir que se las usen para hacer más préstamos. Eso significa que se volverá más caro obtener y otorgar las cartas de crédito que financian todo este sistema.

La medida no debería afectar significativamente a los mercados de metales, y los precios del cobre registraban pocos cambios el lunes. Eso podría deberse a que Beijing -consciente de la necesidad de una transición ordenada- implementará la nueva política en etapas hasta mediados de febrero. También ayuda el hecho de que la medida se produce justo antes de una temporada tradicionalmente sólida para el sector de la construcción.

Pero algo de corrosión en la demanda es inevitable. Henry Liu, analista de metales de Mirae Asset Securities, estima que cerca del 50% de las negociaciones de cobre y el 60% de las negociaciones de acero usan estas cartas de crédito.

Los precios del cobre, que ya están cayendo ante los temores en torno a la deuda de la eurozona y el poco dinamismo de la economía estadounidense, tendrán dificultades para recuperar su momento en los próximos meses.

Fuente: WSJ