2011/06/13

Los extranjeros buscan seguridad en la deuda mexicana en pesos

Por Amy Guthrie

CIUDAD DE MÉXICO (Dow Jones)—La inversión extranjera continúa fluyendo hacia la deuda en moneda local de México en cantidades récord, motivada por retornos relativamente atractivos y un riesgo moderado.

Estos flujos a su vez han fortalecido al peso y profundizado a los mercados de deuda global, proveyendo a México con un amortiguamiento de inversión más amplio y con mayor diversificación, en caso que las turbulencias económicas globales toquen su puerta.

Cifras suministradas por el banco central muestran que la inversión extranjera en títulos del gobierno denominados en pesos alcanzaron un nuevo récord de 802.000 millones de pesos (US$68.000 millones) al 25 de mayo. Tomando en cuenta esos datos, los inversionistas extranjeros tenían en su poder 25% de los 3,24 billones de pesos (millones de millones) de la deuda mexicana en circulación, en comparación con el 20% que poseían en diciembre y el 14% de hace un año.

La compra de bonos ha fortalecido al peso, el cual se ha apreciado 9% frente al dólar en el último año. Recientemente se comerciaba a 11,75 pesos por dólar.

Sergio Luna, economista de Banamex, unidad de Citigroup Inc., dijo que los inversionistas están aprovechando la mezcla en México de una economía bien manejada y un crecimiento, que aunque modesto comparado al de otros mercados emergentes, supera a las expansiones de la mayoría de mercados desarrollados.

México ha sido el patito feo por muchos años. Pero ahora la macroeconomía muestra que puede manejar todos estos golpes, como lo hizo cuando se dio el brote de gripe porcina", dijo Luna.

El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, ha pronosticado que la economía crecerá hasta 5% este año, tras una expansión de 5,4% en 2010 y continuando su recuperación de una contracción de 6,1% en 2009, cuando el brote de gripe porcina golpeó a una economía que ya estaba en medio de una profunda recesión.

El crecimiento está acompañado por una inflación benigna, la cual se mantuvo en 3,4% para finales de abril.

Los inversionistas internacionales comenzaron a prestar atención a la deuda denominada en pesos a mediados de 2010, antes de la inclusión del país en el Índice Mundial de Bonos Gubernamentales de Citigroup, el cual es seguido de cerca en el mercado.

Aunque fue recibido con beneplácito el año pasado, el tamaño y velocidad de entrada de los fondos extranjeros ha generar preocupaciones sobre una posible salida repentina de las inversiones y la volatilidad de mercado que esto conlleva. La fuente más probable de redistribución de activos en el mundo serían los incrementos en las tasas de interés de Estados Unidos.

Carstens dijo la semana pasada que espera que cualquier fuga de capital extranjero sea hecha de manera ordenada. Los recientes flujos parecen ser de largo plazo, indicó a Dow Jones, en vez de inversioncitas "que quieren hacer dinero rápidamente y luego salir del país".

El ministerio de Hacienda de México ha estado emitiendo deuda con vencimientos cada vez más largo, con la esperanza de atraer a más inversionistas que compren los bonos y se queden con ellos, potencialmente frenando el impacto de los grandes movimientos de activos si estos se materializan. La reciente emisión de deuda ha extendido la duración promedio de la deuda del gobierno mexicano de 6,4 años en 2010 a 7,3 años.

Más del 70% de los bonos en pesos en manos de extranjeros tienen vencimiento a largo plazo. Sin embargo, el mayor incremento en la compra de bonos en los últimos 12 meses ocurrió en los Cetes, que tienen vencimiento a corto plazo. Los inversionistas extranjeros ahora poseen un 33% de los Cetes en circulación, frente a apenas 6% hace un año.

"Un giro repentino de la cantidad de valores a corto plazo en manos de extranjeros sería el catalizador para la volatilidad, en nuestra opinión", dijo el economista de Bank of America Merrill Lynch Edgar Camargo.

Luna dijo que espera que cualquier potencial retiro de la inversión extranjera sea mínimo. Los instrumentos de deuda mexicanos han replicado el auge de los bonos de EE.UU. recientemente, indicó, entregando otro incentivo para que los inversionistas sigan en el mercado.