2010/12/06

¿Comprar? ¿vender? ¿mantener? Decisiones de inversión para tomar inmediatamente

Por Gregory Zuckerman

Primero las buenas noticias: Los datos económicos de Estados Unidos han mejorado. La cifras muestran una sorprendente fortaleza en el gasto de los consumidores y las empresas registran ganancias sólidas.

Ahora las malas: Los problemas bancarios en Irlanda, las maniobras militares en Corea y las decepcionantes cifras de desempleo.

A medida que nos acercamos al final del año, los inversionistas se enfrentan a una serie de tendencias confusas, que hacen más difícil saber si es tiempo de comprar o vender.

Un ejemplo de cuán confuso se ha puesto el panorama: la Reserva Federal lanzó un histórico programa para comprar bonos, un paso llamado "relajamiento cuantitativo" que apunta a bajar el rendimiento de los bonos y las tasas de las hipotecas y otras que afectan a los consumidores. Pero los rendimientos a largo plazo de los bonos y las tasas de las hipotecas han subido, no caído, desde que el programa fue anunciado hace poco más de un mes, lo que muestra cuán desconcertante es el actual ambiente para la inversión.

De hecho, el jueves, las acciones cerraron su mejor desempeño en dos días desde julio, solamente días después de lidiar con una marcada debilidad. Luego, el viernes, los datos mostraron que en noviembre el mercado laboral estuvo mucho más débil de lo esperado.

Para tratar de entender todo esto, examinamos sectores clave en el mundo de la inversión y le preguntamos a analistas de primera línea si los inversionistas deberían ser optimistas o pesimistas en el corto y mediano plazo.

Acciones de pequeñas compañías: COMPRE

Este año ha sido bueno para las acciones, pero ha sido excelente para las empresas más pequeñas. El índice Standard & Poor's 100, que representa a las 100 acciones más grandes, subió 6,5% hasta el jueves, en tanto que el Standard & Poor's 500 lo hizo 9,5%. En contraste, el MidCap 400 y el SmallCap 600, que hace el seguimiento de las empresas más pequeñas, subieron 21% y casi 20%, respectivamente.

Jack Ablin, director de inversiones de Harris Private Bank en Chicago, aconseja a los inversionistas aferrarse a las acciones de empresas más pequeñas, especialmente aquellas de mercados internacionales. Esto se debe a que estas compañías han tenido mejoras más grandes en sus ganancias, por lo que todavía se operan a niveles atractivos. Las acciones de las pequeñas se operan con una relación entre precios y ventas de alrededor de 0,4, en comparación con una más cara de 1,2 de las acciones del S&P 500.

Tobias Levkovich, principal estratega de valores de Citigroup de Estados Unidos, argumenta que durante los períodos de mejora en los márgenes de ganancia –que se han estado dando recientemente – las acciones de compañías pequeñas superan a las de las más grandes. Esta tendencia debería continuar durante los próximos seis meses, predice Levkovich, haciendo que las acciones medianas y pequeñas sean el lugar donde hay que estar.

Un gran riesgo para las acciones: China. Con una inflación anual en 4,4%, los líderes chinos están trabajando duro para desacelerar su economía y mantener controladas las alzas de los precios. Si la economía se frena demasiado, afectará al crecimiento global y a las acciones estadounidenses.

Tecnología: COMPRE

En lo que va del año, apostar al gasto de los consumidores ha dado resultado, pese a que la mayoría de ellos están trabajando para recortar sus deudas. Las acciones de empresas de gasto discrecional, o las de compañías que venden objetos como ropa y música, subieron 24%, en tanto las de servicios públicos y cuidado de la salud cayeron 1%.

Algunos dicen que las acciones tecnológicas, que subieron casi 7%, son la inversión adecuada. Alan Zafran, cofundador de Luminous Capital, una compañía de asesoría en inversiones de Los Angeles, agrega que los inversionistas deberían concentrarse en las denominadas acciones cíclicas que tienden a evolucionar positivamente cuando reaparece el crecimiento económico. Le gustan tanto las acciones de las empresas de energía como las de tecnologías de la información, que tienen balances fuertes y crecimiento impactante.

Microsoft, por ejemplo, se opera a menos de 10 veces del nivel de sus ganancias, excluyendo su enorme efectivo disponible y paga un dividendo del 2,5%. Zafran considera que el Congreso debería llegar a un compromiso que permitiera a compañías como Microsoft a repatriar el efectivo que tienen en el extranjero, dando a la empresa todavía más recursos para incrementar su dividendo o dar otros pasos.

Las acciones de las empresas públicos seguirán teniendo un desempeño malo si las tasas de interés de largo plazo siguen subiendo, lo que hace sus dividendos sean menos valiosos.

Oro: VENDA

El precio de los metales preciosos como el oro ha estado subiendo durante parte importante del año y su valor se ha incrementado 28% en lo que va de 2010.

Parte de su fortaleza ha venido de la preocupación por la posibilidad de que las decisiones de la Reserva Federal reduzcan el valor del dólar, lo que allanaría el camino para la inflación. El oro, y en menor medida la plata, tienden a servir como alternativa para la moneda en papel. Así que algunos inversionistas se han apresurado a comprar estos metales preciosos para protegerse contra la debilidad en el dólar, así como en el euro, que está lidiando con el reciente rescate de Irlanda.

Pero algunos analistas dicen que es tiempo para que los fanáticos del oro y la plata retiren sus ganancias de la mesa. El oro tendrá un buen desempeño si el índice de precios al consumidor de EE.UU. sube al menos 3% en los próximos tres años, argumenta Ablin. Pero con la inflación hoy en menos de 2% y mostrando pocas señales de estarse acelerando, los precios del oro podrían no avanzar en el corto plazo, argumentan algunos.

Al mismo tiempo, Levkovich indica que el oro no provee una suficiente diversificación para un portafolio de inversión como alguna vez hizo, porque sube y baja con otras inversiones más riesgosas.

"Soy un creyente en el crecimiento global, por lo que creo que la tendencia al alza de los precios de los "commodities" a largo plazo quedará intacta", dice Mike O'Rourke, estratega jefe de mercado de BTIG LLC.

No obstante, argumenta que la expectativa respecto a las compras de bonos por parte de la Reserva Federal ya generó fuertes compras de oro y otros "commodities" y que ahora los inversionistas deben prepararse para un "retroceso" en esos precios.

Mercados emergentes: VENDA

Se ha vuelto un axioma de mercado el que las economías de los mercados emergentes mostrarán un enorme crecimiento en los próximos años y que la economía estadounidense tendrá dificultades. Ese consenso ya se ha reflejado en el precio de las acciones, lo que sugiere que podría ser demasiado tarde para saltar al tren de los mercados emergentes, dicen algunos.

"Las acciones de los mercados emergentes son caras con respecto a Estados Unidos", dice Ablin, que cita datos que muestran que las acciones de las empresas de los mercados emergentes tienen una relación de 1,3 con respecto a sus ventas, en comparación con el 1,2 de las que integran el índice S&P 500. Las acciones de los mercados emergentes operan a casi 18 veces sus ganancias, muy por encima de la relación de casi 15 para el promedio S&P 500.

De hecho, Goldman Sachs predijo la semana que las acciones de Estados Unidos subirán 23% el próximo año.

El S&P 100 opera a una atractiva relación entre precio y ganancias estimadas de 13 veces y tiene un respetable rendimiento por dividendos de 2,1%. Al mismo tiempo, las compañías de Estados Unidos están llenas de efectivo y sus márgenes de ganancia son amplios, en parte debido a que se han mostrado renuentes a contratar nuevos trabajadores.

"Cada una de las tres veces durante los últimos 20 años que los mercados emergentes mostraron en sus precios una prima de valor, luego tuvieron un desempeño inferior a Estados Unidos en los siguientes 12 meses", recordó Ablin.