2010/11/26

Cambios a la vista en la cúpula del Banco Central de Brasil

Por Paulo Prada y John Lyons

SÃO PAULO—La presidenta electa de Brasil, Dilma Rousseff, nombrará un reemplazo para Henrique Meirelles al frente del Banco Central de Brasil, según una persona al tanto de los planes, lo que confirmaría un cambio que ha intensificado los temores entre los inversionistas de que la inflación pueda aumentar en la mayor economía de América Latina.

La fuente dijo que Rousseff se reuniría con Meirelles hoy para informarle su decisión y que luego anunciaría al sucesor, junto a nombramientos a otros puestos clave de su gabinete. Se espera que el pronunciamiento también confirme su reciente decisión de invitar al actual ministro de Hacienda, Guido Mantega, a mantener su cargo cuando asuma el poder el primero de enero.

Rousseff está considerando a Alexandre Tombini, un funcionario del banco central por mucho tiempo bajo Meirelles, para reemplazarlo en el puesto, indicó la persona. Una vocera indicó que la entidad no podía hacer comentarios.

En los últimos días, la especulación en torno a los cambios ha dado lugar a temores de los inversionistas sobre desviaciones de la política económica del presidente Luiz Inácio Lula da Silva que permitieron a Brasil capear la crisis global y posicionarse para crecer más de 7% este año. Los inversionistas temen que estas modificaciones se centren demasiado en el gasto del gobierno como un impulsor clave del crecimiento económico y pasen por alto las consecuencias que esto pueda tener sobre la inflación.

La inflación, que por muchos años ha provocado volatilidad económica en Brasil, ha empezado a acelerarse en los últimos meses.

El martes, cifras del gobierno mostraron que la inflación continuó su ascenso hasta mediados de noviembre debido al alza de los precios de los alimentos por tercer mes consecutivo. Los datos hicieron que algunos economistas revisaran sus proyecciones inflacionarias para todo el año a más de 6%, comparado con la meta oficial de 4,5% del gobierno.

Meirelles, un firme partidario de controlar la inflación que ha estado al servicio de Lula durante sus ocho años de mandato, con frecuencia discrepó con Mantega y otros asesores del partido gobernante sobre las tasas de interés y otras políticas económicas. Para evitar un sobrecalentamiento de la economía, Meirelles ha insistido en mantener la tasa de interés de referencia a un nivel que la ubica entre las más altas del mundo.

Los analistas indican que Tombini probablemente tendrá una filosofía similar, aunque su relación con Rousseff y su influencia sobre ella tendrían que cultivarse. Bajo Lula, Meirelles disfrutó de una virtual autonomía en el banco central y era conocido por influir considerablemente en las decisiones económicas del presidente.

Su prevista salida, por lo tanto, no es bienvenida por muchos inversionistas.

Pedro Tuesta, un economista de 4Cast, una firma de investigación de los mercados cambiarios y de dinero, dijo que "los inversionistas creen que la política será en su mayor parte expansionista e... impulsará la inflación".

Fuente: WSJ