2010/08/24

La sinceridad de bancos europeos sobre los bonos comienza a decaer

Por David Enrich y Sara Schaefer Muñoz

El objetivo primordial de las recientes pruebas de solvencia a los bancos europeos era arrojar un poco de luz sobre su exposición a la deuda soberana. Pero esa claridad se ha ido esfumando.

Los reguladores de la Unión Europea llevaron a cabo pruebas de resistencia a 91 bancos el mes pasado, con la esperanza de calmar los nervios de los inversores sobre la salud del sistema bancario del continente. Además de mostrar la capacidad de los bancos para soportar una crisis económica severa, las pruebas también requerían que los bancos informaran de su exposición a la deuda soberana --deuda emitida por los estados-- a 31 de marzo.

Ahora algunos bancos no están facilitando detalles actualizados de deuda soberana. Otros están usando metodologías diferentes para calcular su exposición de una forma que no concuerda con el proceso de pruebas de resistencia.

Esto ha producido fuertes cambios en las tenencias de deuda de las que informan estos bancos, que no están detallando claramente los cambios.

"A los bancos les incumbe detallar bien su exposición soberana", dice Leigh Goodwin, analista de banca de Citigroup. "En su mayoría lo han hecho, pero desde luego podría haber una alineación más clara".

La falta de una información estandarizada por parte de los bancos hace difícil, si no imposible, que los inversores puedan saber cuán expuesto está cada banco a los distintos países europeos. Éste es un asunto importante, dados los temores sobre los riesgos de algunos de los bonos emitidos por gobiernos con problemas financieros.

Aunque muchos expertos cuestionan el rigor de estas pruebas, ya que sólo siete entidades las suspendieron, los inversores aplaudieron la gran transparencia de los bancos al informar sobre sus carteras de deuda soberana.

La exposición a la deuda soberana ha provocado turbulencias en los mercados en distintos momentos desde comienzos de año. Estos temores aminoraron en las semanas inmediatamente después de las pruebas de solvencia, pero han resurgido de nuevo por las últimas señales que apuntan a que la zona euro sigue atravesando problemas económicos.

Entre los bancos que no dan detalles de su exposición a la deuda soberana están los franceses BNP Paribas SA y Societe Generale SA, cuya exposición a la deuda de los países periféricos de Europa ha puesto nerviosos a los inversores.

Este mes, los tres mayores bancos británicos dieron a los inversores datos a 30 de junio sobre su exposición a la deuda soberana de los países con mayores déficit, como Grecia, Irlanda, Portugal, Italia y España. Pero esta información varió mucho frente a los datos publicados como parte de las pruebas de solvencia dos semanas antes.

Barclays PLC, que tuvo la mayor calificación en las pruebas, informó entonces de que tenía 787 millones de libras (US$1.220 millones) en deuda soberana italiana a 31 de marzo. Los últimos datos facilitados por el banco, a 30 de junio, indican que esta exposición ha aumentado hasta 8.600 millones de libras. La exposición del banco a la deuda española subió un 50% desde el 31 de marzo hasta los 6.400 millones de libras del 30 de junio.

Mientras, la exposición a la deuda irlandesa de Royal Bank of Scotland Group PLC parece que ha caído hasta 327 millones de libras a 30 de junio desde los casi 4.300 millones de libras de los que informó en la prueba de solvencia. Su exposición a la deuda española casi se dobló desde el 31 de marzo hasta 1.600 millones de libras a 30 de junio.

No es raro que estas carteras varíen, ya que las preferencias de inversión de los bancos evolucionan, pero esto no explica totalmente los significativos movimientos de cartera de los que han informado.

Un portavoz de Barclays, Richard Treadwell, dijo que el banco con sede en Londres calculó las cifras del 30 de junio usando una metodología diferente de la que el Comité de Supervisores Bancarios Europeos usó para las pruebas de resistencia.

Treadwell señaló que no tenía una explicación completa para las diferentes cifras.

La portavoz de RBS Claire Gorman también dijo que las diferencias entre las cifras del 31 de marzo y del 30 de junio se debían en parte al uso de metodologías diferentes.

Fuente: WSJ