El curso que se inicia hoy va a estar marcado en el ámbito financiero por la reconversión del sector de cajas de ahorros.
El Gobierno dejó listo antes de irse de vacaciones el instrumento clave que vertebrará este proceso: el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), que deja en manos del Banco de España los aspectos técnicos de esta reconversión, pero que da al Ministerio de Economía amplios poderes para poder vetar las operaciones que se planteen con el apoyo de fondos públicos.
El baile de las cajas de ahorros ya se ha iniciado en Cataluña y Andalucía. En la primera comunidad autónoma, las cajas de Sabadell, Terrasa y Manlleu tienen están ya preparadas para iniciar su integración. En Andalucía, Unicaja ha hecho público la absorción de Caja Jaén y Cajasur; al mismo tiempo Cajasol sigue estudiando sus posibilidades de crecimiento, que podrían pasar por la integración de Caja Granada y la absorción de una entidad de fuera de la comunidad andaluza.
También está sobre la mesa el futuro de Caja Castilla-La Mancha, intervenida por el Banco de España desde el mes de marzo. La entidad registró en 2008 unas pérdidas de 740, 42 millones de euros y acumula 138,45 millones desde el inicio del año.
UBS ha estado trabajando estos meses en las opciones de futuro de la entidad y debería presentar en las próximas semanas un informe. La liquidación está descartada tanto por el regulador como por las principales fuerzas políticas de la región (PSOE y PP). Por tanto, las opciones más plausibles pasarían por una subasta de sus activos y pasivos entre las cajas de ahorros o por la fusión con otra entidad, con ayuda pública incluida.
Otro de los procesos abiertos es el de las cajas de Castilla y León. Caja Duero y Caja España ya trabajan en su fusión, un proceso al que se podría incorporar también Caja Burgos.
No obstante, el baile no se quedará entre estas entidades. De alguna forma u otra, las entidades deben reciclarse para hacer frente al nuevo escenario financiero, caracterizado por un aumento de la morosidad que va a continuar en los próximos trimestres y un mayor coste para obtener financiación, lo que fuerza a la baja los márgenes de la cuenta de resultados de las entidades y hace inevitables los procesos de fusión.
EL BCE
Durante el próximo curso se vivirá, con toda probabilidad, un viraje en materia de tipos de interés, pero éste no llegará en el corto plazo. Así lo consideran los economistas, que auguran nuevos encarecimientos del precio del dinero, pero a partir de mediados de 2010.
Desde octubre de 2008, el Banco Central Europeo (BCE) ha rebajado los tipos desde el 4,25% hasta el mínimo histórico del 1% en el que se encuentran actualmente, debido a la gravedad de la crisis económica y financiera. Los últimos mensajes lanzados por parte de las autoridades mundiales confirman que la economía ha entrado en la senda de la recuperación.
Algunos países lo han manifestado de forma más clara que otros, como Alemania y Francia, que salieron de la recesión en el segundo trimestre. Sin embargo, el consumo, uno de los motores del crecimiento, todavía permanecerá muy debilitado. «Esperamos que el BCE eleve los tipos de interés en los próximos meses. De hecho, hasta finales de 2010 ¿Y para cuando un cambio en el discurso? Probablemente para la primera mitad del próximo año», indica José Luis Martínez, estratega en España de Citi.
Por otro lado, otra de las razones por las que el BCE se tomará su tiempo antes de aplicar la primera subida de tipos es la evolución que ha mostrado la inflación. Según datos de Eurostat, los precios cayeron un 0,2% en agosto, frente a la caída del 0,7% que mostraron en julio, cuando el objetivo del BCE es que permanezcan por debajo, aunque en niveles cercanos, al 2%. Otro de los asuntos que centrarán la atención en 2010 en lo que respecta a política monetaria consiste en la estrategia de salida que configuren los bancos centrales, lo que cobra gran importancia principalmente en Estados Unidos y en Reino Unido.
Tanto la Reserva Federal (Fed) como el Banco de Inglaterra han aplicado medidas heterodoxas más agresivas que el BCE y han inyectado miles de millones de dólares y libras, respectivamente, en el sistema, mediante la compra de deuda. Ambos deberán evitar los riesgos hiperinflacionistas que pueden derivar de la puesta en marcha de la máquina de imprimir billetes.
SEGUROS
Por su lado, las aseguradoras abordan el nuevo curso político con la incertidumbre instalada en la fiscalidad de sus productos, uno de los aspectos que más marcan la evolución de su negocio.
El anuncio de la subida de impuestos, que podría centrarse en las rentas de capital, aunque más o menos previsible, es un jarro de agua fría para el sector y frena en seco los estudios y preparativos internos que desde hace meses se realizaban en la patronal aseguradora Unespa para pedir mayores beneficios fiscales para algunas de sus ofertas como el seguro de salud o el ahorro a largo plazo. El ahorro rescatado en seguros de vida tributa al 18% como la mayor parte de los productos financieros (depósitos, fondos de inversión, acciones etc.) y con la reforma podría subir hasta sobrepasar el 20%.
Las aseguradoras de coches, al margen de la fiscalidad, centrarán sus esfuerzos en capear el recorte de su negocio por la caída en la matriculación de nuevos vehículos que aunque se ha frenado algo con las ayudas económicas del Gobierno, está muy lejos aún de estabilizarse.
Lo que viene
1. La reconversión del sector de cajas de ahorros va a tener un claro protagonismo en el curso que hoy se inicia. El Ministerio de Economía contará con amplios poderes para vetar las operaciones que se diseñen con el apoyo de los fondos públicos.
2. El baile de cajas se ha iniciado en Cataluña, con el proyecto de fusión de Sabadell, Terrasa y Manlleu, y en Andalucía, con la prevista unión entre Unicaja, Caja Jaén y Cajasur. Otras entidades estudian difrentes alternativas de crecimiento.
3. Caja Castilla La Mancha, intervenida por el Banco de España desde marzo pasado, tendrá su historia particular en los próximos meses. Su futuro, una vez descartada su liquidación, podría pasar por la subasta de sus activos o por la fusión con otra firma.
4. Caja Duero y Caja España trabajan también en su fusión a la que podría incorporarse Caja Burgos. La lista se ampliará con el paso de las semanas, ya que las entidades deben reciclarse para adaptarse al nuevo entorno financiero.
5. Mientras tanto, la morosidad continuará creciendo en los próximos meses, lo que unido al mayor coste para obtener financiación, forzará a la baja los márgenes de las cuentas de resultados de las entidades, y hará inevitable los procesos de fusión.
6. A partir de mediados del próximo año, los expertos auguran un nuevo encarecimiento del precio del dinero. Los tipos de interés están ahora en el 1%, su mínimo histórico, punto al que han llegado debido al calado de la crisis económica y financiera.
7. Los últimos mensajes lanzados por las autoridades mundiales confirman que la economía internacional ha entrado en la senda de la recuperación. Sin embargo el consumo, uno de los motores del crecimiento, todavía está débil.
8. Las aseguradoras abordan el nuevo curso con la incertidumbre sobre el diseño final de la reforma fiscal anunciada por el Gobierno. Todo apunta a que los seguros de vida verán perjudicado su tramiento igual que los depósitos o los fondo de inversión.
Fuente: Expansión