Por Justin Lahart y David Wessel
Dos economistas estadounidenses, Elinor Ostrom y Oliver Williamson, que estudian la forma en que se toman las decisiones fuera de los mercados y sobre las que se basan muchos otros economistas, fueron galardonados el lunes con el Premio Nobel de Economía de 2009.
Ostrom, profesora en la Universidad de Indiana, en Bloomington, es la primera mujer en ganar el premio en esta categoría. Hasta hoy, el premio había sido concedido a 62 hombres desde que fue lanzado en 1969 para celebrar el 300 aniversario del banco central sueco. El comité de jueces citó "su análisis sobre el gobierno económico, especialmente de los bienes comunes", la manera en que los recursos naturales son gestionados como recursos compartidos. Según la economista, se trata de un área de investigación relevante en las cuestiones relativas al calentamiento global y sugiere que las decisiones de las personas pueden resolver el problema incluso cuando los gobiernos tratan de alcanzar un acuerdo internacional.
Ostrom "desafió el conocimiento convencional de que la propiedad común está mal gestionada y que debería ser regulada por autoridades centrales o ser privatizada", dijeron los jueces del Nobel. Sin embargo, numerosos estudios demostraron que la propiedad administrada por usuarios –como bancos de peces o áreas forestales— es en la mayoría de los casos mejor manejada que lo que las teorías comunes predecían. Ostrom concluye que los resultados son en muchos casos mejores que lo que predicen las teorías estándares. Por ejemplo, señala que "los usuarios de recursos frecuentemente desarrollan sofisticados mecanismos para tomar decisiones e implementan normas para lidiar con los conflictos de interés".
Ostrom, que fue entrevistada por teléfono durante la conferencia de prensa que anunció el galardón, en Estocolmo, describió el premio como "una inmensa sorpresa" y dijo que seguía un poco "en estado de shock".
Su doctorado es en ciencias políticas, pero se considera una economista política.
Williamson, que enseña en la Universidad de California, en Berkeley, fue premiado por "su análisis de gobierno político, especialmente los límites de la empresa", o en otras palabras, la razón por la que algunas decisiones económicas son tomadas en los mercados y otras dentro de una empresa.
"La desventaja de los mercados es que a menudo involucran regateo y desacuerdos", dijeron los jueces. "La desventaja de las compañías es que pueden abusar de la autoridad, que mitiga la controversia. Los mercados competitivos funcionan bastante bien porque los compradores y vendedores pueden recurrir a otros socios de corretaje en caso de desacuerdo. Pero cuando la competencia es limitada, las firmas están mejor posicionadas para resolver los conflictos que los mercados. Una predicción clave de la teoría de Williamson, que también ha sido probada empíricamente, es que como consecuencia que la propensión de los agentes económicos a llevar a cabo sus transacciones dentro de los límites de una empresa aumenta junto con las características de sus activos".
El Premio Nobel de Economía es el único de los seis que no fue creado en el testamento del empresario sueco Alfred Nobel, en 1896, y es conocido oficialmente como el Sveriges Riksbank en Ciencias Económicas en Memoria de Alfred Nobel.
Los dos economistas compartirán un premio de 10 millones de coronas suecas (unos US$1,4 millones). Ostrom dice que espera poder dedicar este dinero a la investigación y a ayudar a estudiantes de postgrado.
Fuente: WSJ