2010/01/15

Es poco probable que la Fed cambie de rumbo en su reunión de enero

Por Jon Hilsenrath

Pese a que las autoridades en la Reserva Federal esperan que la economía estadounidense crezca este año demasiado lento como para que se produzca una reducción significativa en la tasa de desempleo, es probable que concluyan durante su reunión del 26 y 27 de enero que no es mucho más lo que pueden hacer.

Eso significa que mantendrán su plan de finalizar las compras de valores con respaldo hipotecario a fin de marzo, retirar en febrero los programas de préstamos de emergencia y continuar con el compromiso de mantener las tasas de interés en niveles excepcionalmente bajos durante al menos varios meses más.

"Creo que vamos a esperar a que la economía mejore de una forma sólidamente sostenible, y hasta que eso ocurra, luego es poco probable que cambiemos la política", dijo esta semana a la prensa Charles Evans, presidente del Banco de la Reserva federal de Chicago.

El elevado desempleo es uno de los varios problemas que incomoda a los funcionarios de la Fed en momentos en que buscan dejar atrás gradualmente su importante rol en el rescate.

También les genera inquietud el estancamiento de la recuperación inmobiliaria cuando la Fed concluya en marzo las compras de US$1,25 billones en hipotecas. La Fed cuenta con US$919.000 millones en esos valores.

Eric Rosengren, el presidente de la Fed de Boston Fed, estima que las compras de hipotecas de la Fed han ayudado a bajar las tasas hipotecarias entre un cuarto y tres cuartos de un punto porcentual. Cuando el banco deje de comprar estos valores, dijo el funcionario mediante un portavoz, no espera que las tasas suban en la misma proporción debido a que la Fed seguirá teniendo una cartera bastante grande.

Muchos funcionarios de la Fed consideran que el alza será de menos de un punto porcentual por lo que no afectará seriamente la recuperación del sector de la vivienda. Una encuesta de The Wall Street Journal entre varios economistas mostró que casi dos tercios pronostican que las tasas hipotecarias ascenderán menos de un medio punto porcentual cuando la Fed cese sus compras.

Los funcionarios de la Fed están dejando abierta la posibilidad de que se realicen más compras de hipotecas en caso de que la economía y el mercado de la vivienda se debiliten. Pero si la economía tiene un buen desempeño, como la Fed prevé, la mayoría de los funcionarios parecen estar abiertos a dejar que el programa termine.

"Existe el deseo de liquidar paulatinamente estos programas de compra tan pronto como tenga sentido y hay fechas establecidas para hacerlo", afirmó Dennis Lockhart, presidente del Banco de la Reserva Federal de Atlanta en una entrevista.

Cuando realmente quieran elevar las tasas de interés, los funcionarios de la Fed tendrán al menos dos palancas de qué tirar. Ellos podrían drenar parte del US$1 billón que han inyectado al sistema financiero o pueden elevar una tasa que ellos pagan directamente a los bancos por el dinero que es mantenido como reserva en la Fed. El alza de esas tasas sobre la reservas obligaría a los bancos a elevar las tasas que cobran por los préstamos que se otorgan entre sí. Cualquiera de las dos medidas restringiría las condiciones financieras.

Los funcionarios de la Fed no han decidido qué paso tomar primero. Con las preocupaciones sobre la vivienda y el empleo, ellos no se sienten inclinados a tomar una decisión apresurada.

Fuente: WSJ